Pan Adoré

Es un lugar cuco en Malasaña. No tiene una carta larga pero la comida está bien y tiene un menú de 11 euros (que son platos de la carta). Son razonablemente rápidos. Yo volveré pero en ocasiones concretas (quedar durante el día con alguien) por la falta de variedad en la carta. Fueron muy amables quitándome algún ingrediente

Decidí entrar a este encantador lugar para tomar algo mientras disfrutaba de un relajado domingo en el Rastro. Me habían recomendado el té helado, y debo decir que fue todo un acierto, aunque debo advertir que es bastante dulce, así que si no eres amante de lo empalagoso, mejor optar por otra opción. Sin embargo, lo que realmente me conquistó fue la croque, simplemente deliciosa. La atención del personal fue excelente y la comida, en su mayoría, estuvo a la altura. La única decepción fue el yogurt con granola, que estaba desabrido y he probado mejores en otros lugares. A pesar de ese pequeño tropiezo, mi experiencia en general fue estupenda y definitivamente consideraré volver en el futuro.

Buen menú diario. Muy buena calidad en la comida. Solo 2 personas, 1 en cocina y otra atendiendo, un pelin saturada pero muy simpática y siempre con una sonrisa. Estuvimos en un sofá al lado de la ventana súper fresquitos. Sitio pintoresco y curioso. Para tomar algo en plan informal o de menú ligero recomendable.

Paramos a comer algo rápido por la zona. Aunque nuestra idea era un brunch se nos había hecho ya casi la hora de comer. El local no tiene aire acondicionado pero si ventiladores en el techo y todas las ventanas abiertas. Siendo verano en Madrid quizás no resulte suficientemente refrescante pero es mejor que estar en una terraza. Pedimos la especialidad de la casa, la croque, un sándwich con pan parecido al de semillas que en una de sus capas tiene besamel. En concreto pedimos la madame que venía con huevo frito. Estaba muy buena. Acompañada con tomate y lechuga. También probamos la limonada. (Fresca, con hierbabuena, muy rica). Nos atendieron de forma correcta. Los precios eran asequibles.

Un café conveniente y bien ubicado entre la latina y Lavapies. Sirven lo típico de una cafetería más algunas opciones de brunch. Tienen una opción de desayuno completo por 7,50 que incluye café o té, zumo de naranja, una tostada con tomate y un croissant, ideal para compartir si se quiere algo ligero. El servicio es súper rápido y las que atienden son atentas.

Desayunamos tres personas un sábado y un domingo. El trato del personal es una mejorable, el sitio tiene encanto. La comida está cuidada y con una cantidad correcta. Buena relación calidad/precio. Por poner un pero hay un solo baño mixto que se queda corto para la clientela del lugar. Recomendaría/Volvería