Que Si Quieres Arroz Catalina

Sitio con encanto en Casa de Campo, en un antiguo palacete, especialidad en arroces valencianos y paella. Servicio muy profesional, la paella valenciana, aunque no es la auténtica 100÷, lleva los mismos ingredientes y está muy rica de sabor. También pedimos un arroz al senyoret que estaba muy bueno. Raciones generosas, que junto al buen sabor se ve reflejado en el precio. Salimos a unos 35€ barba con una botella de vino, yendo con el descuento en el Tenedor. Para volver.

Fuimos a una prueba de menú para una boda y salimos rodando. No es la mejor manera para valorar puesto que comes más de lo habitual y no pagamos, pero puedo decir que la comida estaba bien. Destaco los arroces, son expertos en eso. El local es amplio, tiene varias zonas para organizar eventos y zona de aparcamiento. La atención del personal fue correcta en todo momento.

Excelente experiencia! El local es muy agradable y el servicio es de 10. Nuestra comida se retrasó un poco por un problema en cocina y los camareros nos recompensaron con entrantes y bebidas gratis. Un detalle Los arroces son increíbles, probablemente la mejor paella que he tomado. Me han quedadl ganas de volver y probar otros arroces.

Genial descubrimiento , arroces de primera ideal para ir en familia (tienen zona de juegos para los peques ) o simplemente para degustar un buen arroz con tu pareja . El trato del personal es impecable así da gusto . Sale a cuenta sus menús cerrados o sino el descuento del 30% de el tenedor . Si quieres paella valenciana tienes q encargarla mínimo tres horas antes, desconozco la razón ..

Elegimos el Menú Catalina y todo estaba bastante bueno. La purrusalda, la ensaladilla, las croquetas y rabas. Mención especial para el alioli, muy suave y buenísimo. La cosa fue que cuando llegó la paella valenciana ya estábamos llenos y no la disfrutamos tanto, pero es una valenciana de verdad y está brutal.

Sitio precioso, comida espectacular y trato impecable. No se puede pedir más. Precio más que razonable. Fuimos un sábado con los niños (3 y 5 años) y cuando terminaros de comer se fueron a jugar a la amplia sala infantil con cuidadora, ellos también se lo pasaron genial. Así nosotros pudimos tomar el postre y el café tranquilos.

Fuimos a comer varios amigos y quedamos encantados. La comida expectacular, pedimos arroz meloso de bogavante y estaba de 10. El rabo de toro increible, y tambien os recomiendo las bravas, delicadas y con un toque de arte sin perder el sabor de siempre. La variedad y calidad de los postres muy acorde con el resto de la carta. 100x100 recomendable. ¡En mi proximo viaje a Madrid visita asegurada!

Cuando llegamos, tenían preparada una mesa redonda, tal como solicitamos. El trato fue muy bueno. En todo momento estuvieron pendientes y nos presentaron los platos de una manera muy correcta. Los baños están muy limpios y tienen detalles como enjuague bucal para los clientes. ¡Nos encantó! Muy recomendable el arroz del señorito y las croquetas.