Cafeteria Iris

Cafeteria muy agradable con una terraza que está pegada a la Iglesia. Más céntrico imposible. Cenamos unas raciones para compartir. Está bien que de casi todo tienes la opcion de pedir media racion (aun asi son abundantes) y así poder probar diferentes platos. El surtido de croquetas estaba muy bueno. Nos sorprendió gratamente el pescado empanado, blanquisimo y sin ninguna espina, parecia pollo y muy sabroso. El pan es lo unico que era un poco mejorable ya que estaba algo gomoso. Opcion de pedir botella de agua grande por 1,50€ (agua de Teror). Y tienen tronas. El personal super amable. Todos los camareros encantadores.

Desde que entramos en el establecimiento se respiraba alegría! No dudaron en darnos el mejor servicio a pesar de estar en días de fiestas en el pueblo. Personal rápido, servicial y resolutivo. Comida casera, el alioli buenísimo. A pesar, de no tener pan para bocadillos, no dudaron en ponernos un poco del famoso chorizo de Teror para probarlo. Definitivamente, estos son los detalles que marcan la diferencia !

Para empezar Teror es precioso, es un pueblo que diría que hay que ver casi por obligación si tienes la posibilidad. Encontramos este sitio justo en la plaza y fue un acierto total. La comida buenísima con unos precios muy asequibles y el camarero es una pasada, simpatiquísimo y muy atento.Nos fuimos muy contentos de allí y los recomendamos 100%.

Una cafetería que su apariencia es de lo más normalito pero cuando te sientas empiezas a percibir la esencia de Teror. (Pueblo espectacular y con mucha historia que recomiendo se visite). La camarera nos recomendó pedir ropa vieja y fue sin duda la mejor opción. Exquisita, nos quedamos impresionados. Y qué decir de sus papas con ese mojo tan rico. Volveremos solo por comer esos dos platos.