1890 La Bodeguita

Que mal empezaron q me ponian en mala mesa.. pero no. Me cambiaron. Ademas soy media pensión..que puedo esperar. Pues no. Me cambiaron de mesa, y me pusieron en la terraza. Pedi un tartar de atun y steak tartar. Hacia tiempo… pero tiempo.. q no me encantaba algo. El atún en tartar rojo tomate y cortado del rico.. y aderezo verdadero. Pero luego el steak.. no podían hacerlo bien también??? pues toma.. corte pequeñito no pate sucio..alcaprras muy muy rico como le gustaba a mi padre. Y de postre… nada llega el profesional q me atendía y me recomienda la torrija de siempre con helado. Pero no seria yo quien cambiara el menú. Zas.. menuda torrija.. de torrija nada… hay q disfrutarlo una especialidad. Solo quiero agradecer la sorpresa y el disfrute de algo.. q no me esperaba. Y el profesional, es un maquina. Felicidades a todos.. yo he flipado. gracias.

Muy buena localización y ambiente, el restaurante está muy cuidado y es agradable comer en la terraza con vistas al hotel y los jardines. La carta me pareció algo escueta, con poco donde elegir. Comimos un salpicón de pulpo y langostinos muy simple, nada del otro mundo. También una ensalada con salmón que estaba mejor. De plato, un entrecot para compartir acompañado de pimientos y papas. Un poco caro para una cocina que me pareció muy sencilla y sin más.

Hemos pedido Chuletón un lingote de mango, tarta de la abuela, helado de chocolate con pistacho y un Syrah 2019 espectacular todo!!!!! El servicio de lujo, la atención espectacular de Raquel y la coordinación, el punto de la carne así como el backstage de la cocina a cargo de Inma, es todo un lujo. Gracias a todo el equipazo de LA BODEGUITA !! He vuelto a comer, el pescado Sama con salsa de Huevos benedict es colosal

👍👍👍👍👍 Todo un acierto. Ya desde que llegamos fueron todo sonrisas y cuidados por parte del personal. Todos muy atentos. Lo menos l@s encargad@s de la zona donde nosotros cenamos. Restaurante de alta cocina con un servicio de lujo. Restaurante en el centro de la ciudad de las palmas de Gran Canaria. Excelente cocinero o chef. Gastronomía variada y carnes de primerísima calidad. Excelente la recomendación de la camarera. Buenísimos los vinos que probamos. En los bajos del hotel santa Catalina, es preferible que pidas mesa. Adaptado a la movilidad reducida en todas las zonas y comedores reservados del restaurante tiene pasillos y baños amplios. Los baños súper limpios y mantenidos con limpieza durante todo el servicio. Los platos en su justa medida. Muy bien emplatada. Maravillosa la tarta de queso, muy recomendable Excelente comida y mejor trato del personal.

Bueno, como se suele decir luces y sombras, hemos estado varias veces y que vaya por delante, que el restaurante es espectacular de lo cuidado y bonito que está, además de donde está situado. La tranquilidad de cenar en la terraza, disfrutando del entorno merece la pena. La comida, esta última vez pedimos, unos calamares, que siendo e Santander yo el listón está muy alto para superar unas "rabas" como los llamamos nosotros a los calamares. Un plato de jamón ibérico que estaba bastante bueno, y nos trajeron unos patés con una selección de panes que a mí particularmente no me gustó mucho. Mi mujer carrilleras, y yo solomillo, y esta vez no estaba tan bueno como en ocasiones anteriores, además de un buen trozo de solomillo unas papas caseras debería estar obligado por "ley" pero bueno, así no engordo tanto. El postre es lo que se quedó entero en el plato, un concepto de gintonic en plato, con granizado de limón que no pudimos comer, un sabor muy extraño. El trato de 10, muy bien servicio, personal muy atento y profesional.

Este fabuloso restaurante no deja de maravillarme cada vez que voy, sus platos son más que deliciosos y la atención es de 10. Ya no solo es su buena ubicación y la perfecta combinación de la decoración Canaria al estilo contemporáneo sino el buen ambiente que emerge de este restaurante por sus empleados, la música y la cercanía al mar. Muy recomendable.

Gran satisfacción, el lugar, la excelente atención y servicio, la decoración, la gastronomía, verdaderamente muy bueno. Única pega mayor amplitud en rones premium y el precio de las bebidas algo por encima de la media. Por el resto recomendado 100x100. Un 10 para las croquetas cremosas explosivas en boca y la brioche de torrija, ya quiero volver a degustarlo. Bravo al chef!!!

La visita al parque dora más fue la excusa perfecta para conocer este precioso restaurante ubicado en el hotel Barceló Santa Catalina. LOCAL: Interiormente tiene muchisimo encanto. El contraste de la madera con la piedra volcánica de las paredes hacen jugo precioso. Ademas, cuenta con una terraza con vistas al hotel espectacular. PERSONAL: Todo el personal fue profesional rápido muy la altura del tipo de hotel en el que nos encontramos. MEDIDAS COVID19: Los camareros llevaban mascarillas ya había gélida alcohólico a disposición de los clientes en las zonas comunes. COMIDA: Platos para compartir: - Ensaladilla rusa: Bastante no hermanita y hasta diría que un pelin sosa. Ni de lejos de las mejores que hemos probado. - Croquetas de chipiron: Excelentes, para comer de un solo bocado. Explotaban en la boca y se llenaba de un intenso sabor a Chipirón. - Torrija: aceptable, aunque mejorable. - Acompañemos la comida de un par de cervezas y agua. PRECIO: 27 €/Persona ¿LO RECOMENDARIA? si, aunque hay que tener en cuenta que las raciones no son muy abundantes, pero bastante buenas.