El Pequeno Bodegon

Restaurante ubicado al lado del Hotel Sta. Catalina,en un recinto denominado como el nombre del restaurante, posee salones interiores y terraza muy agradable. Calidad-precio bueno principalmente los entrantes. Atención del personal atent@s y profesional, la jefa de sala un poco seria poco atenta e irrespetuosa. Algo difícil el aparcamiento aunque existe parking próximos y fácil acceso sillas de ruedas. No muy aconsejable para vegan@s y celiac@s.

Un lugar precioso que trata de rescatar la esencia de las tradiciones canarias. Fuimos la primera vez en 2008 para ver los bailes tradicionales canarios que se solían ofrecer los fines de semana. Se llega muy facilmente desde el centro histórico de Vegueta, Triana o desde Playa de las Canteras con autobús o guagua, como se dice en Canarias o paseando como una hora o menos. Vale la pena ver el lugar y el folclore.

Una zona de terraza muy agradable en la que comimos un menú cerrado para 12 personas. La verdad es que los entrantes y los postres estuvieron bien, pero nada especial, mientras que el bacalao sí que mereció la pena. Todo esto acompañado con bebida a lo largo de la cena. Eso sí, excesivamente caro para el nivel de los platos y de la comida en general.

Espectacular restaurante en una de las partes del centro de Las Palmas de Gran Canaria. En todo momento los profesionales estuvieron de 10, atentos y muy amables. La comida estuvo increíble, tanto la ropavieja de chipirón como los canelones de puchero. De postre, probamos el mejor polvito uruguayo hasta la fecha. Una visita muy recomendable sin lugar a dudas. La única pega es que no sirven vasos de agua ni en casos de necesidades como para tomar alguna medicación.

Comida muy buena, presentación perfecta. El servicio excelente. Muchos camareros ,muy atentos. Sacan los platos rápido y no tienes que estar pendientes de ellos para absolutamente nada. Una gozada la verdad. El ambiente, el lugar es muy bonito , la única pega que le saco es que en mi caso fui a cenar y había una mesa con más de 25 personas con sus respectivos hijos... unos 10 corriendo,gritando y jugando por todos lados. Lo cual es bastante molesto para los que estamos alrededor cenando.

Oferta gastronómica variada y de calidad. Pedimos terrina de foie,tacos de solomillo y bastones de berenjena que como podéis observar en las fotos tenían muy buena pinta. Estaba todo en su punto, perfectamente cocinado y muy muy rico. El servicio muy amable, cercano y profesional. El lugar tiene una terraza que apetece tener todo el tiempo del mundo para disfrutar de la comida. El precio acorde con la calidad de lo ofrecido. Sin duda muy recomendable. Volveremos!

Fui con mi pareja y me encantó la experiencia. La comida estaba deliciosa y la atención muy buena, sobre todo por parte de la chica morena que nos atendió al final. Pedimos: Patatas con mojo: buenísimas, iban nadando en la salsa y estaban increíbles. Ropa vieja de chipirones: delicioso, creo que hay que probarlo si o si si vas a este sitio. Van acompañados de un alioli pero muy suave, así que los ingredientes se saborean perfectamente. Canelones de puchero: muy buenos, cremosos y suaves. El pan que acompañaba la comida estaba caliente y muy rico.