Reviews Restaurant Deskaro

Vinimos a La Azohía y nuestro restaurante de referencia, el Villamares, estaba cerrado. Por la proximidad a la playa de San Ginés y las reseñas, decidimos volver a probar (era un sitio al que veníamos bastante en el ínterin del traspaso del otro restaurante). La mesa en la terraza es espectacular, nada que envidiar a un chiringuito de playa, y el trato en todo momento muy educado y servicial. Pedimos para los niños buñuelos de bacalao y patatas, y para el otro hamburguesa. Los buñuelos no me dio tiempo a probarlos, pero la hamburguesa, con pan de brioche estaba muy buena. Un par de croquetas de cocido, lo menos destacable, el rollito, muy bueno pero muy pequeño, y para mi el tartar de atún. No estaba mal, sobre wakame y pan de arroz, pero mis expectativas eran algo mayores. De postre, la tarta de queso, una especia de mousse y la tarta de coulan, potente, para compartir es perfecta. De precio muy bien, y como digo, muy probablemente repita. Las 4 estrellas en el servicio tienen que ver con tener que pedir varias cosas varias veces, pero muy correcto

Una muy buena opción si lo que buscas es algo diferente y bonito. La ubicación ofrece unas vistas muy bonitas tanto de día como de noche, aunque quizá sea por la noche cuando goza de mayor encanto. Dispone de tres zonas, salón, terraza y balcón, las tres gozan de vistas al mar aunque curiosamente sea el salón el que mejor las aprovecha gracias a sus grandes ventanales ya que el balcón cuenta con una barandilla muy alta y la terraza se sitúa en un nivel inferior que los anteriores. En cuanto a los platos no entraré en detalle porque cambian la carta muy recurrentemente (cosa que está genial para seguir acudiendo sin dejar de sorprenderte), sólo diré que de las 3 o 4 veces que lo he visitado, en todas ofrecieron un producto de calidad con un toque novedoso y diferente. Personal muy atento y amable, incluso nos dejaron cambiar de zona después de la cena para tomarnos un cóctel y un vino en una zona más cómoda. Además disponen de parking para los clientes. No es barato pero el precio está justificado.

Sitio diferente donde probar platos elaborados y distintos a lo habitual. El servicio por parte de Dani ha sido excepcional, trato muy atento y las recomendaciones acertadas. Las vistas al mar y del atardecer acompañaron genial en todo momento.

Es un sitio bastante bonito, con unas vistas preciosas durante el día. Por la noche no se ve la bahía, pero el restaurante tiene una decoración y unas luces muy agradables. Además, en la terraza corre el aire, lo que en verano se agradece bastante (por la noche). El servicio es muy ágil y muy rápido. Nos ha atendido un camarero muy joven y lo ha hecho requetebién. El chaval se lo curraba mucho, ha sido muy atento y extremadamente majo. En cuanto a la comida, cuentan con una carta bastante innovadora. Hemos probado bastantes platos y en general estaba todo muy bueno pese a no ser comida casera al 100%. La presentación estaba bien, todo ha salido de cocina perfectamente hecho y las combinaciones de sabores eran coherentes. De los entrantes hemos probado los croquetones de caldero, los rollitos de cangrejo y gulas, las gyozas y el pan indio con anguila y bacon. Todo estaba muy bueno y me parece bastante recomendable. Aunque dudo mucho que estos platos sean caseros, volvería a pedir todos ellos sin dudas. También hemos pedido como platos principales el calamar salteado y las costillas de cerdo. Las costillas estaban muy jugosas y la carne se desprendía sola del hueso. El calamar estaba muy sabroso y algo picante, tal vez para cenar no sea la mejor opción porque es algo fuerte. Lo único que puedo decir que no nos ha gustado nada es la hamburguesa (solo tienen una en la carta). Consistía en un pan bastante normal, con media loncha de bacon medio crudo, un filete de carne que dicen que es de vacuno y cuatro hojas de mix de lechuga sacadas de una bolsa. Se supone que la hamburguesa también debía llevar una rodaja de tomate y la nuestra no lo llevaba. Además, llevaba una cucharada muy escasa de una salsa/queso. Sin duda, este plato me parece totalmente prescindible en la carta y muy fácilmente mejorable. Que las patatas fritas sean de bolsa es tolerable, que no se hayan molestado ni en hacer su propio filete de hamburguesa no lo es. Me puedo hacer la misma hamburguesa en mi casa en 5 minutos y por menos de 5€. La carne estaba mala a rabiar. No recomiendo pedir este plato para nada. Hay opciones mil veces mejor en la carta. A pesar de la mala experiencia con la hamburguesa, volveré a este restaurante. En general la cena ha sido muy agradable, el servicio muy competente y los platos estaban muy buenos. Para culminar, recomiendo probar la torrija con dulce de leche. Sin duda, es un buen postre para acabar con buen sabor de boca.

Chiringuito muy bonito con vistas al mediterraneo . Tiene varias zonas diferenciadas para comer así como zona de juego de niños y gran aparcamiento privado . Realizamos la reserva para 4 para cenar en terraza . La atención del personal muy buena , estando pendiente de nosotros y dando recomendaciones muy acertadas . Para compartir nos pedimos : croqueton de caldero ( excelente ) , patatas bravas ( no picaban mucho ) , verduras en tempura ( excelentes ) . Como plato principal escogimos costillar barbacoa( muy bueno ) , Tartar de atún ( excelente ) y atún y arroz con salsa de curry ( lo peor ) . Es necesario reservar y merece la pena .

Fui a este emplazamiento, bastante recomendado por las redes sociales y que decir, muy encantado. Lo primero de todo y hay que decirlo,la localización, más espectacular, no puede ser,con pleno mar a tus pies y el ambiente del local, los hace mas afines. Y lo importante,la comida y el servicio,de 12 sobre 10. Todo lo que comimos,muy bueno y sabroso. Para el centro,unas bravas (donde voy,tiene que pedir las bravas), con su salsita mágica, y como principal, un costillar que se deshacía solo con la brisa del aire, tremendo y un lomo de pescado fresquísimo y muy sabroso. Volveré a repetir.

Me encanta este restaurante a pie de la cartagenera playa de la Azohía. Terraza exterior a la sombra, el interior con una bonita decoración, muy ventilado y fresco, con grandes cristaleras por las que disfrutas de la vista del mar. La atención del equipo estupenda, desde el primer momento. todos amables, simpáticos y profesionales. Pedimos diferentes tostas de entrante, la de pan indio estaba exquisita. Los croquetones de caldero, cremosos por dentro, deliciosos. Los calamares no recuerdo cómo están cocinados pero son sabores nuevos, diferentes y ricos- la carne a la plancha muy tierna y gustosa (nos dejaron una plancha portátil en la mesa para quien la quisiera más hecha, pudiese a su gusto) . Y para terminar compartimos tres postres, muy buenos, pero sobre todo el de tarta de queso con arándanos, y galleta caramelizada en polvo...espectacular. Muy buena relación calidad-precio. he estado ya varias veces y sin duda repetiré.

Excepcional enclave para restaurante ,donde se mezcla un buen producto local con matices de cocina de varias nacionalidades japonesa,india,peruana... con un resultado agradable que cumplirá con la intención que buscabas al elegirlo.

En Deskaro nunca fallas, servicio y atención impecable, comida con un toque diferente y rica, incluyendo postres que son toda una experiencia. Ambiente playero pero elegante, casi sofisticado, para soñar desde un enclave paradisíaco como es La Azohía.