Malkoa

Fui con la familia hace unos días para celebrar el cumpleaños de mi hermana y reservamos para comer aquí en malkoa. Recomendable reservar porque el local no es muy grande. Decidimos coger varios platos para compartir y así probar de todo un poco. Adjunto a la reseña hay todas las fotos de todos los platos que elegimos. Yo desde luego me quedo con la morcilla de leon y el cachopo. El coulant de chocolate blanco estaba buenísimo. La verdad ha sido una muy buena experiencia y seguro que repetiremos en otra ocasión para seguir probando diferentes platos. La atención de los camareros fue muy buena y la relación calidad-precio me parece genial.

Fuimos por un vídeo del tapas Barcelona, nos pedimos primero unas croquetas bueniiiiisimas, las de cocido impresionantes!! después pedimos sus famosas bravas 3 salsas.. pero una de las salsas hizo que soltase agua inundando las bravas .. una pena porque estaban buenas, se lo dijimos a la camarera pero me dijo que la salsa era así.. le enseñamos la excesiva agua que tenían las bravas ...llenas de agua ?? En fin mala experiencia, menos mal de las croquetas..

Pasamos por la puerta y la vimos entreabierta. Todavía no habían abierto al público y preguntamos si había hueco para comer 2 personas. Nos comentó que estaba todo reservado, pero que nos dejaba una mesa si acabábamos antes de las dos. Y así lo hicimos. Carta con nombres de platos atractivos y seductores. Escogimos chicharrón de Cádiz, croquetas y cachopo, pero bien merece la pena probar cualquier otro. Calidad excelente de los productos y tamaño más que correcto. Cuando alguien hace bien lo que sabe, se nota y se agradece. Planificaré otra visita con su reserva correspondiente para saborear otros productos. No es barato, pero "no molesta" el precio dado el buen nivel ofertado.

Tercera vez que vamos y no deja de sorprendernos, no precisamente por su variedad de carta, sino por la tremenda calidad del trabajo bien hecho. Platos con un toque personal y llenos de sabor. Calidad precio muy aceptable. Servicio ágil y siempre que vamos está lleno. Dejaros sorprender porque dentro de esta charcutería reconvertida, encontraréis una experiencia gastronómica diferente.