Gastrobar Mandi

La chica que nos ha atendido es una maravilla de simpatía. Sabe aconsejar. Hemos tapeado unas papas aliñás, pimientos asados y tortillitas crocanti de camarones con gambas y wakame. Esto último nos dejó sin palabras de lo bueno que estaba. Medallones de solomillo con salsa strogonof y pulpo a la plancha con salsa de aceite, ajo y perejil, verduras y arroz. Muy recomendable.

Lugar espectacular,comida buenísima en calidad, presentación,sabor exquisito,por supuesto el personal muy atento y muy simpáticos todos,enhorabuena a la cocina😋😋,pocos sitios hay así 👌🏼👌🏼,precios asequibles para todos los bolsillos. Pedimos tapa de ensaladilla de pulpo aunque se me pasó echar la foto,luego pan baho con carne ibérica una salsita buenísima y cebollita crujiente,seguimos con unos fideos tostados con alioli y langostinos y terminamos compartiendo una presa ibérica con patatas y verduras . Nos habéis ganado el estómago ☺️

Un gastrobar para comer con calma,sin prisas,no es el típico barato donde te echan de comer. Los platos son muy elaborados,con muchos detalles q hay que degustar despacio. Los preparan en el momento,con lo cual,puede tardar un poco más en servirte si esta lleno el local,pero al menos ,en nuestro caso,nos compensa la calidad y el detallismo de las cocineras que lo hacen todo exquisito. Los camareros simpáticos no...lo siguiente, además son todos gente muy joven,con muchas ganas de trabajar y agradar a los clientes. Ya es la segunda vez q vamos, y cada vez probamos cosas diferentes porque todo está riquísimo,pero la próxima vez no se me escapa el plato de fideos tostados con gambones al ajillo y alioli,porque huelen de maravilla, para la próxima. Felicidades al equipo.

Que nos ha encantado se queda corto. Los platos espectaculares, de primerísima calidad y riquísimos. El ambiente estupendo y la atención de primera. Ha sido la primera vez pero repetiremos, y ya lo vamos recomendando a la familia, que nosotros somos de buen comer. :) Hay que decir que los platos, supongo que por la elaboración, tardan un poquito en llegar, pero se está tan agusto que no nos importó y el resultado merece la pena. Además, como éramos siete comensales, la charla para ponenos al día dió para rato y no nos dimos cuenta del tiempo de espera.