Mosto Domi

Buen domingo, la comida buena, tardaba en llegar pero había mucha gente y los camareros no daban para más mucha demanda y se puede entender. Día muy agradable no frío ni calor y pudimos ver el caballo que hay en un encerramiento junto a ovejas y una gallina que estaba por allí. Muy buen choco a la plancha, las carrilleras, el venao.

Lugar emblemático de jerez de la frontera donde podrás degustar platos típicos de la campiña así como mosto de temporada. Es un lugar agradable y campero. Mis platos favoritos son la berza, el ajo caliente y el pollo al ajillo. La tortilla merece muchísimo la Pena (sobre todo la de perejil). Hay animales en el exterior y a los niños les encanta ver a las ovejas, gallos y demás. Visita obligada cuando acaba el veranito y empieza el frío.

Ya los conozco desde hace unos años gracias a unos familiares de Jerez. Siempre he comido berza porque no es un plato que se pueda hacer en casa con regularidad, pero hoy por azar del destino he probado la que ha sido con mucha diferencia la mejor carrillada de mi vida. El servicio es espectacular y las instalaciones son amplias, aptas para todos los públicos, todo limpio y enmarcado en un ambiente tradicional, familiar y esplendido. 100% recomendable y por supuesto repetiré y repetiré todas las veces que sean posibles. Un 10!

Comida buena y casera. Restaurante de los que aquí en Jerez llamamos "mosto". Situado en la carretera de Trebujena, a la salida de Jerez, se llega por caminos de tierra. Platos típicos a buen precio, sabrosos, variados y generosos. Posee un interior muy apañado y una terraza exterior amplia. El ajo campero es su especialidad, igual que las carnes guisadas a la manera tradicional y los pescados fritos. Todo muy bueno. Tienen buen mosto, pero ha subido su precio de venta ( 5,5 euros el litro y medio). Excelentes la berza y el menudo, la carrillada y el rabo de toro. Por cierto, de esos sitios donde no ponen patatas congeladas. El único pego que pongo es que no cuidan servir a los comensales a la vez, sino que sacan los platos tal como van saliendo. Servicio atento y amable. Muy recomendable, sobre todo los viernes al salir del trabajo. Hay que llegar temprano porque se llena. Creo que solo abre desde otoño hasta finales de primavera, aunque podría abrir perfectamente las noches de verano, pues posee una terracita apañada.