La Piedra Larga

Nos gustó mucho las puntillitas bien fritas, muy finas y de buena calidad. Salmonetes también bastante buenos. Ensaladilla aceptable. El picadillo de culantro era mejorable pero estaba bueno. Muy bien el tartar de atún. Unas croquetas de carabineros bastante resultonas pero que desafortunadamente estaban hechas con leche, cosa que omitieron en la carta de alérgenos y hubo una comensal en nuestra mesa que tuvo que ir rápidamente a una farmacia a tomarse una pastilla de lactasa. Menos mal que notamos sabor a lácteo que nos confirmaron desde cocina y reaccionamos rápidamente. El caso es que otros tipos de croquetas sí lo advertía la carta pero no esas de carabineros y por eso las pedimos. Un grave error que espero que el restaurante corrija rápidamente por el bien y la salud de los que son intolerantes a la lactosa y creen en la veracidad de lo que en la carta se indica.

Buena opción con carta muy amplia, carnes, pescados y elaborados de la tierra, carnes a la brasa con exquisito sabor a precios razonables, el servicio bueno y los tiempos de espera bastante bien, disponen de varios salones y una terraza que aunque está en la calle es bastante agradable pues en invierno da el sol a medio día.

Sitio espectacular para almorzar o cenar, excelente atención de los camareros, nos pedimos para 2 Personas unos huevos rotos con langostinos y foie, un besugo a la plancha que nos lo preparó el camarero para solo tener que pinchar y comer. De postre un flan de huevo casero y Nos invitaron a 2 chupitos. La cuenta, 60€ muy justos para la calidad que ofrecen. Volveremos siempre que podamos!