Meson Baño Frio

El sitio es acogedor. La chica que nos atendió muy amable. Lo que más nos gustó fue el ajoblanco y la tarta de la abuela, buenisimos los dos. El mixto de carnes a la brasa no cumplió nuestras espectativas: no muy abundante y de calidad normalita. Los huevos rotos con sobrasada los salvaron las patatas a lo pobre. Los precios un poquito elevados para lo que ofrecen; y con ello no me refiero a los del Groupon (que ya sabemos que son super reducidos), me refería a los que pedimos fuera del menú, es decir, de la carta, como la ensalada de tomate con aguacate y los huevos rotos (que se debería llamar huevo roto porque solo había uno). Como ya he dicho, el ajoblanco y la tarta exquisitos, pero siento decir que del mixto de carnes a la brasa, por mucho que sean del afamado Noalejo, no nos terminaron de gustar, no estaban sabrosas (ni el chorizo, ni la morcilla, ni el beicon que estaba bastante pasado, ni la costilla poco hecha para mí gustó, ni el pollo algo insípido).

Situado aun poco menos de media hora de Granada en coche y muy cercano a la localidad de la Malahá, el restaurante Baño Frío, nos ofrece unas magnificas instalaciones para poder reponer fuerzas, tanto en su terraza con el sus bonitos salones decorados a la antigua usanza y donde se respira tranquilidad. Su carta es amplía y siempre se nos planteara el problema de que no podemos comernos todos sus platos en un solo día, con lo que nos veremos obligados a volver, merece la pena. Yo destacaría, sus torreznos, sus huevos revueltos con sobrasada, sus caracoles y como no sus carnes a la brasa.

Ubicado en La Malahá, Granada, el Mesón Baño Frío es un verdadero tesoro gastronómico. Su carne es simplemente sublime, con cada bocado ofreciendo una explosión de sabores que deleitan los sentidos. Pero no es solo la comida lo que hace que este lugar sea especial; su encantador patio es un remanso de tranquilidad y belleza, ideal para disfrutar de una comida al aire libre. Además, el local en general desprende un ambiente acogedor y auténtico que te hace sentir como en casa desde el primer momento. Sin duda, volvería una y otra vez para deleitarme con su exquisita comida y disfrutar de su encantadora atmósfera.

Para quien le guste el buen comer,con comida de calidad y cantidad es uno de los mejor sitios de los alrededores de Granada.Si te apasiona la comida casera este restaurante lo recomiendo al 100%. Mejor trato en el servicio con un trato familiar que en muy pocos sitios se ve ya.Cada vez que vamos me siento como en casa...el arroz a la lumbre una locura!!! Ya que decir de los caracoles,esas carnes a la brasa,los postres... Mejor de que te lo cuenten es ir a visitarlos!!!

Hoy ha sido mi primer día en este restaurante , lo conoci mediante unos amigos … la experiencia ha sido buenísima , pedimos unos entrecot denominados clandestino premiun y Uff , echos a la leña es un manjar , para el centro unos huevos revueltos con sobrasada ibérica y unas alcachofas premiun , nada tiene un pero , se nota que tiene mano casera todo , luego nos han ofrecido una tetera de hierbabuena árabe por qué la verdad que el postre no nos entraba , pero queda pendiente para la próxima , relación calidad precio o buena alta para el producto de calidad .

Celebramos la comunión de mi hija aquí con intención de celebrarlo en el espacio de césped que tienen pero llovió muchísimo. Ismael y su equipo dejó todo perfecto a contrarreloj para celebrarlo dentro. La comida estaba riquísima, los invitados quedaron encantados y con ganas de volver. Y el servicio de las camareras perfecto, súper atentas y siempre con una sonrisa. Sin duda fue todo un acierto elegir Baño Frío!!

Sitio estupendo. Increíble las vistas, la atención y la comida. Sitio muy recomendable para comer de buena calidad y a buen precio. El arroz caldoso para tres, hemos comido 9, y además es uno de los mejores que he probado en mi vida. Por cierto, la pata de pulpo exquisita!! Gracias a todo el personal y a la cocinera por esta magnífica experiencia. Volveremos sin duda.