Restaurant Café Le Bistrot

Nadie que visite Girona debe prohibirse de tener la experiencia de desgastar en cualquier momento del día algo exquisito en esas escaleras. Recomiendo cenar temprano y disfrutar del atardecer en el lugar. La comida es muy sabrosa y esta muy bien presentada. El servicio es eficiente pero algo estresante la velocidad con la que se mueven lo que no coincide con el relax y disfrute que invita el lugar. La carta está solo el catalán, que para los que no lo conocen puede resultar algo dificulto guiarse en la misma.

Hemos estado en el Café Le Bistrot entre semana, para comer. Un menú muy completo y con diferentes opciones de dos platos o un plato, postre y bebida. Creo que es una opción fantástica poder elegir. En referencia al local, tiene mucho encanto con elementos de decoración acordes a su antigüedad y con ese toque romántico francés. Y no podría tener mejor ubicación, las escaleras de la Pujada de Sant Domenec, el Palau dels Agullana y Sant Martí. En cuanto a la comida y el servicio hacía tiempo que no comía tan bien. La comida fantástica en cuanto a cantidad, elaboración y variedad de platos. Y el servicio, desde la recepción al camarero, un 10! Sin duda, repetiremos. Un lugar del Girona que no os podéis perder. Muchas gracias por la velada Café Le Bistrot.