La Marquesa Sidreria Parrilla

Comimos de menú (11€) y la comida era abundante y buena (muy ricos la fabada y el flan y el arroz con leche). El servicio muy atento y agradable. Fuimos con un perro de tamaño grande (nos sentamos en el borde del local, en una mesa de la zona que queda abierta y parece terraza) y nos ofrecieron también agua para él. Nos gustó mucho el sitio.

Un gustazo, después de una mañana de playa en Gijón a finales de agosto 2023. Habíamos recordado este sito a una calle de la playa de San Lorenzo, con grandes ventanales, trato cercano y sobre todo relación calidad-precio muy buena. Destacar la acogida de Víctor Mecha, un camarero dicharachero como te encuentras en esos sitios que quieres repetir sólo por llevarte otra vez una buena experiencia. Qué más decir, 2 menús del día nos costaron menos de 2 billetes azules (como la bandera asturiana). Reflejo de que se puede comer bien, abundante y barato. Cuando volvamos a esta bonita ciudad, volveremos a La Marquesa. Gracias.

Lugar con claroscuros. Lo peor: varios platos se acaban pronto, por lo que si vas a las 3 de la tarde ya no tienes de todo. También, el servicio es lentísimo y con poco orden. No sé si son pocos camareros en horas punta, o que la cocina no da a basto. Lo mejor: el pescado es bastante fresco y los menús abundantes. El precio del menú básico es de 10 euros. El de 22 € no lo probamos, pero tenía buena pinta.

No somos españoles, estamos viviendo en Gijón por una temporada y nunca nos hemos atrevido a entrar en este restaurante porque nos sonaba como algo caro y pretencioso, a pesar que nos gustaba el ambiente. Hoy hemos ido a comer porque nos llamó el menú de 18 euros con varios platos y todo incluido. La verdad es que nos ha sorprendido la cualidad de los platos, sinceramente mucho mejor de otros menús de precio análogo en otros restaurantes de la zona. Había sopa de marisco riquísima como entrante y después un montón de platos entre los que se podía escoger. Mi pareja ha pedido almejas y rabo. Yo crema de puré con pulpo y linguado relleno de marisco. Todo riquísimo. El vino, que normalmente en los menú todo incluido es un asco, en este caso era un roble de 2017. Bueno, toda una sorpresa, hasta los postres caseros, los únicos que nos ha dado tiempo de fotografar, ya que estábamos hartos de comida :)

Sidreria cercana a la Playa de San Lorenzo. Decoración tradicional, con variados menús donde el marisco es protagonista y con precios muy competitivos. (Centollo entre 18 y 24 euros/kg) ,y que podremos verlos vivos antes de su preparación. El pastel de cabracho bueno y en gran cantidad. Personal agradable y cercano en el trato. Buenos vinos.