Farragua Restaurante

Pues de nuestro periplo por Asturias sin duda el mejor resguardo te que visitamos. Un Resturante pequeño y acogedor, con un trato excelente tanto de los camareros como del chef (dueño) que nos recibió y vino a la mesa a interesarse por nuestra opción. Tomamos el menus pequeño, pero fue una auténtica pasada. Sabores y texturas que quedan para el recuerdo. Sin duda volveremos!!

Brutal cocina de Ricardo! Un cocinero llamado a ser protagonista de la gastronomia de nuestro pais. Farragua mezcla a la perfección, innovación, honestidad y sabor. Llaman la atención el uso de ingredientes menos habituales, pero sin sacrificar sabor. En un ecosistema saturado de los mismos sabores (trufas y compañias…), Ricardo juega a la perfeccion con la tecnica y el producto menos habitual. Volveré sin duda y espero que pronto caiga esa merecida estrella. Enhorabuen!

Un lugar excepcional, de lo mejor de Gijon. Se nota el cariño y las ganas de hacer las cosas bien del chef. Platos sorprendentes, que se salen de lo habitual en Gijon, y a un precio muy asequible para este tipo de restaurante. Sin duda le espera un buen futuro, quien sabe si con una Estrella más pronto que tarde!

Hemos perdido la cuenta de las veces que hemos visitado Farragua desde su apertura, y siempre impecable. Hay calidad, hay producto, hay un chef detrás (Ricardo Señorán) con ideas, conocimiento y experiencia para crear platos inigualables. Sin duda me parece muy positivo que el chef pregunte gustos y aconseje a los comensales para escoger el menú, y por supuesto que se atreva con platos arriesgados. Respecto a la sala es un espacio muy coqueto, acogedor y cuidado al mínimo detalle, por ejemplo con la cubertería. Respecto a las bebidas, merece la pena dejarse llevar por la Sumiller y que ella adapte la bebida a la selección gastronómica. Sin duda se eleva mucho la experiencia. (Fotos de las últimas visitas en el verano de 2023)

Visita obligada en pleno centro de Gijón. Llevábamos ya bastante tiempo queriendo ir y, sin duda, superó las expectativas. Reservamos con antelación el menú corto para cenar (Menú Asina). Un menú de cuatro platos y postre a elección del chef. Ricardo, el chef del restaurante, se acercó a nosotros para preguntarnos si teníamos alguna alergia o intolerancia, o si había algún alimento que no nos gustase. El resto ya es toda una experiencia que recomiendo muchísimo. El trato magnífico y la comida pues qué decir, espectacular. Muchísimas gracias a todo el personal, tened por seguro que volveremos.

Un lugar increíble, situado al lado de Cimadevilla, relativamente pequeño, tranquilo con un servicio amable y atento, donde se come de forma alucinante. Quizá no arriesga con productos y fusiones muy rebuscadas, va a lo conocido y a lo cercano pero lo trata de forma única, dotandolo de sabores y texturas únicas. He ido a sitios donde me han sorprendido con sabores nuevos o fusiones muy vanguardistas, pero este sitio es una vuelta de tuerca a lo común, aqui sorprende la combinación de texturas, es pura armonía gastronómica. Mi enhorabuena más sincera, ya que hemos disfrutado muchísimo.

en pleno centro de Gijón, mucho más sofisticado de lo que su exterior anuncia. El ambiente invita a la intimidad nada más bajar los escalones de acceso: las mesas son discretas y la vajilla, de un tamaño más reducido al habitual. Piezas pequeñas y coquetas. Encantadora experiencia gastronómica. Menú degustación excelente en relación calidad-precio. Platos con mucho sabor, productos de alta calidad y complejidad en boca. Ricardo, el chef, es amabilísimo con los comensales, la explicación de los platos muy buena y su equipo son unos profesionales auténticos.

Una bella experiencia con el menú Asina. La crema de verduras y las mollejas de ternera - algo de otro mundo. El chef sale a hablar con cada comensal después de acabar la comida. La cantidad me ha parecido un poco justa, falta un plato más, para nuestro gusto, o mejor dicho para nuestro apetito ))) Pero sin duda alguna repetiremos y recomendamos a todos probar esa cocina por un precio más que modesto para este nivel de comida.

Experiencia excelente que recomiendo y repetiré. Local.acogedor y tranquilo, servicio profesional pero cercano. Cocina, de otro planeta. Platos con elaboraciones muy pensadas y sorprendentes, el bonito con escabeche cítrico mi favorito. La molleja exquisita. Hay tres opciones de menú y si algo no te encaja o tienes alguna alergia se adaptan a lo que te encaje. Hemos tenido la suerte de poder hablar un poco con Ricardo y descubierto que, además de un gusto excelente en cocina, también este proyecto va de ser consecuente con tus valores y compartir tu manera de entender la gastronomía. Genial