Lugar pequeño pero acogedor, terracita con preciosas vistas. Lugar situado en el pequeño pueblo de Galilea (Mallorca) con una población de unos 300 habitantes. Comida mallorquina bien hecha, excelentes postres caseros y un servicio y amabilidad exquisitos. Único lugar para comer en Galilea. Un paseo después por el pueblo y disfrutar del silencio interrumpido únicamente por los pájaros. Lugar y restaurante muy recomendable.
El cochinillo,espectacular!. Mejor reservar para comer.
Ubicado en la plaza de Galilea, te recomiendo que reserves y si puede ser en la bonita terraza con muy buenas vistas.
Pedimos para compartir unas croquetas variadas, un crujiente de sepia con sobrasada y miel y de plato principal costillas de cordero con patatas caseras y pimientos y un rodaballo que tenía de fuera de carta. Tienen postres caseros como tiramisú y tarta de queso.
Todo estaba súper bueno y volveremos a probar los huevos rotos con bogavante que hay que reservar con antelación.
Buena atención y muy amables. Buena relación calidad precio.
El Martes comimos allí. Esta era nuestra tercera visita y al ser festivo nos preocupaba que estuviesen muy ocupados y salir decepcionados. No fue el caso: ¡maravilloso! Realmente es un pequeño café en un pequeño pueblo que merece mucho la pena visitar.
La comida es realmente buena, preparada con gusto y con muy buena mano. Las raciones generosas; relación calidad precio es excelente. Lo que nos hará volver, sin duda es el servicio. Saber que tu visita cuenta, que importa si te gusta lo que te han servido o no es un básico difícil de encontrar hoy en día donde casi todo vale. Volveremos y recomendaremos seguro. Gracias.
No le doy más de 5 estrellas porque no se puede! Es de mis lugares favoritos para comer en la sierra de Tramutana!
La comida es 100% casera, abundante, si encargas con tiempo las paellas... estan deliciosas. Encargué una en marzo, por mi cumpleaños, para 15 comensales, y cumplió con creces las expectativas. Estaba buenisima y todo el mundo contento. hempos vuelto más veces y todo muy rico y tradicional.
Las vistas son impresionantes, la terraza una pena que sea pequeña.. pero es super agradable. Por dentro el local es muy acogedor.
Finalmente, se nota que es un negocio familiar, pues Chema el camarero es super atento y servicial, y su madre tambien es un encanto. Siempre pendientes de que los comensales estemos comodos y nos quedemos satisfechos.
Siempre lo recomendamos :) Merece la pena subir hasta Galilea
Es un lugar súper acogedor con vistas espectaculares la atención es maravillosa y muy agradable la comida está deliciosa y los postres caseros súper ricos los recomiendo mil veces
Primera vez que iba y he salido encantada,hemos pedido calamares a la romana y paella de marisco,muy muy bueno,el sitio acojedor,tiene una terraza con vistas muy bonitas.Destacar el servicio,excelente! Muy amables y atentos en todo momento,volveré seguro! 😉🥰
Ruta en moto y desconexión.
Teníamos muy poco tiempo y nunca habíamos estado en Galilea.
Tienes que dejar el vehículo en el parking y subir a pie muy poquito y llegas al Café sa plaça.
El trato de los dueños es muy bueno.
Entras en una casa mallorquina con mesitas y cuando sales a la terraza te das cuenta que somos unos privilegiados.
El lugar es espectacular ❤️.
Pedimos para comer un entrante de sepia con sobrasada y yo pedí una ensalada mallorquina.
La tipica cesar con quelytas y salsa mostaza y miel. La verdad que muy buena.
Seguro volveremos 🥰.
Encantador y maravilloso todo. Un lugar con preciosas vistas, y un personal súper atento en todo momento, camareros muy simpáticos y agradables. La comida completamente casera y muy buena, con buenos precios y cantidades correctas, incluyendo los postres. Cocina rápida y buena presentación, todo limpio y organizado. Sois geniales!
😍Lugar en bellísimo paraje,personal muy amables y profesionales,tapa de sobrasada con queso muy bien echo y buenísimo 😘
🙆🏼♀️ Estaba lleno pero volveremos en otra ocasión para comer 🙏🏼
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