Madrid-berlín Bistró

Trato imperfecto, sencillo, honesto, sincero, humano, real, normal, no profesional, bueno, de bien, paz, cara, buenas intenciones y sensaciones, de verdad, como a mí personalmente me gusta, de hecho de pasar un ratito de día verdaderamente a gusto, integrado, a mi rollo, saben hacer que te sientas más y mejor que en casa para alegría de mi mujer. En cuanto a el tema de la gastronomía evidentemente es necesaria pero para mí lo de menos, también exquisita. Es el lugar donde enseguida conoces, trabajas y te, se, incorpora a la vida y sociedad del pueblo. Se puede sentir que todo el mundo es igual, local, no extranjero, de hecho hay una mezcla muy rica y bonita, que este, Galicia, Finisterre y el Fin del Mundo son el principio de una nueva vida y este. Recomendable no, el lugar, por y para toda la familia.

Nada más llegar sentí que entramos en un ambiente muy acogedor y nos recibió una camarera muy amable. La comida estaba muy rica, tomé un sándwich mixto de entrante y un plato de pasta con verduras de segundo. El postre fue la crema paraíso, la cual me recordaba a un sabor que no supe cuál fue... Además de ser comida bien preparada y rica el precio es más que asequible, ¡sin duda repetiría!

REALMENTE SORPRENDENTE EN TODOS LOS ASPECTOS! Hoy he visitado este encantador lugar en compañía de mi pareja, y en verdad nos ha encandilado. Situado en la calle turística principal del pueblo, el Madrid - Berlín Bistro sorprende con su pequeño pero precioso local. Una de las cosas que más me ha gustado ha sido la bonita, delicada y mimada decoración; nada más entrar por la puerta se puede ver la sala del comedor y la cocina al fondo. Con una iluminación cálida y acogedora, destaca la ambientación familiar de este sitio que realmente te hace sentir como en casa. Los cariñosos dueños son la guinda del pastel del restaurante; son realmente entrañables, amables y cercanos con los clientes. Y de la comida... ¿Qué decir? INCREIBLE! Hemos comido dos pepitos de ternera, tres bratwurst (dos de ellas diferentes a la primeras, pues el dueño con su cortesía nos las dió a probar también), comimos acompañando a las salchichas alemanas una kartoffelsalad la cual era increíble, y lo mejor... ¡Una receta especial de la madre de la dueña! Para finalizar comimos un bocadillo de lomo con pimientos que estaba realmente delicioso. 100% recomendable sin lugar a dudas! Si pasan por fisterra, pasen por este precioso sitio. Destaco que al finalizar nuestra velada nos quedamos maravillados escuchando al dueño del local cantar con ese vozarrón de barítono que tiene, (25 añazos cantanto profesionalmente ópera en Zarzuela!) ALUCINANTE! Os invito a venir a lo que se convertirá en vuestra segunda casa. <3

Productos de la tierra de la mano de un Madrileño muy del norte, Gorka, y una Berlinesa muy Gallega, Ángela. Madrid-Berlín, una mezcla así es garantía de éxito, algo distinto en Finisterre con ricos platos e increible conversación. No dejes de probar la ensalada Alemana de Ángela y las albóndigas de Gorka, todo ello tratado con exquisito cariño.