Canela Fina Gastro

Bonito restaurante, amplísimo, con las mesas muy separadas. El servicio excelente, mucha amabilidad y la comida con luces y sombras: el jamón y los torreznos espectaculares de ricos, las coquinas mal, las tuve que devolver (saladas, muy hechas y con arenilla) y eso que tenían muy buena cara; el solomillo y el bacalao buenísimos, pero el pulpo dejó mucho que desear (en la foto aparenta más de lo que realmente fue), hubiera estado mejor un poco menos cocinado. Y los postres, que delicia de milhojas y de sopa fría de canela con helado de fresa y piña a la plancha. Volveré otro día, a ver si tengo más suerte con las coquinas.

Me ha parecido un restaurante genial dentro de Daimiel. Uno que, sin temor a equivocarme, podría decir que es de los mejores del pueblo. La calidad de la comida de primera, el trato de los camareros fue exquisito, el ambiente del local muy cuidado y acogedor. En esta ocasión los platos pedidos (huevos con piquillos, gulas y gambones y un solomillo de bellota con mermelada de pimientos y manzana), simplemente eran algo genial. El sabor era intenso, cuidado y se podía intuir el deseo de servir algo que inexorablemente guste y aprecie el cliente en su justa medida. Es un sitio que de ir a Daimiel a comer o cenar, bien vale la pena tener en cuenta como una de las mejores opciones.

El sitio agradable y grande, comimos en la terraza muy bien atendidos. Pedimos el menú que además de muy buen precio casi salimos rodando, todo muy bueno, el menú era al centro jamón ibérico y queso, ensalada muy original y chipirones, de segundo merluza y cordero las dos buenísimas y el postre una Copa con helado, nata, fresa etc también riquísimo. También entraba en el menú una botella de vino muy rico y agua