El Caletòn

En primer lugar cuando llamamos trato cercano y muy amables. Comimos en una mesita junto al mirador. Agua fría y una buena copa de cerveza, en todo momento nos aconsejaron acerca de la carta que tienen, ni que decir que todo el pescado que ofrecen es fresco del día. En nuestro caso pedimos vieja a la espalda y bocinegro frito, todo acompañado de papas con mojo y una poquita de ensalada con salsa. Al empezar a comer se acerco el camarero y nos trajo una nuevo plato de vieja cortesía de la casa (al parecer a cocina les pareció pequeña la primera que trajeron, DETALLAZO DE LA CASA) Trato, servicio, calidad y precio excepcional. No os podéis ir de la isla sin visitarlo

Un sitio humilde, negocio familiar, carta reducida debido a la localizacion remota perdida en Jandia, pero eso lo hace especial. Pescado fresco. El pulpo a la vinagreta muy recomendable. El arroz marinero es arroz largo con buen sabor, aunque podria estar mejor. Algo dalado al final quizas. El enclave en un pueblito pesquero y las vistas son espectaculares.

Un restaurante ideal, con comida tradicional canaria casera. El personal súper amable y bastante más rápido que en otros restaurantes de la isla. La oferta de platos súper interesante si vas buscando algo original y buenas cantidades. Pedimos la sopa de pescado que viene con gofio, las croquetas y unas papas. De postre una tarta casera que estaba buenísima. El lugar en el que está es idílico. Desde luego repetiría, me encantaría volver.

Vale la pena llegar hasta aquí solo por el caldo de pescado. Riquísimo. El caldo trae trozos de pescado y papas, acompañado de gofio y cebollita. Éramos cinco personas pero pedimos caldo para cuatro ya que viene muy resuelto. También pedimos de entrante pulpo frito, muy rico pero caro para ser solo un rejo.