Aunque la ubicación haya cambiado, el servicio y la calidad es la de siempre. Además de una comida buenísima, el local es muy agradable y el personal aún más.
Los calamares, ensaladilla y las berenjenas buenísimas. Me he quedado con las ganas de probar la carne… volveré!
Carta reducida y servicio más dedicado. C’an Rafa se ha trasladado del centro de Ciudadella a las afueras. A 5 minutos del centro en coche y vale la pena.
El lugar es precioso y súper bien reformado.
La cocina de Rocio continúa siendo deliciosa y ahora comes sin la prisa del centro. Recomiendo reser
Un rincón mágico. Tiene un encanto especial la atención es rápida y muy personalizada Rafa es muy amable.
La comida estaba muy rica y una muy novedosa el contestare de la comida . Super recomendable visitar
Trato excepcional
Comida muy rica
Precio bueno
Nos ha encantado el lugar
Aunque haya cambiado de ubicación, sigue siendo espectacular cenar en tu casa Rafa.
Todo buenísimo, hay que probar las croquetas y la tarta de queso.
Hasta el año que viene!
Un lugar donde sentirte como en casa para desayunar y cenar, toda la carta exquisita, las berenjenas con miel son un espectáculo para el paladar, para desayunar no se pueden dejar de probar los churros y una gran variedad de tostadas, raciones abundantes y lo mejor la atención de Rafa y Rosa
Cenamos super agusto en la terraza, todos los platos buenísimos y Rafa nos atendió de 10. Volveremos seguro!
Sitio muy recomendable tanto por la atención del personal como por la comida. Platos típicos menorquines y casi toda la carta adaptada a sin gluten. Es un sitio seguro para los celiacos ya que controlan mucho la contaminación cruzada. A destacar las berenjenas rebozadas, pero estaba todo muy rico 😊
No me extraña que este a tope, el trato fenomenal, se nota que es granaino, se come genial, las tapas de 10.
Probar la fritura de pescado, berenjenas con miel, la sepia (TODO)
Super bien, precio económico para la buena calidad que da. Nada que envidiar a los restaurantes del puerto.
Hay que hacer co
Fuimos a cenar sin reserva y como en muchos sitios pasa aquí en Menorca tocó esperar cola. Rafa nos dijo que habíamos tenido suerte que nos tocó la mejor mesa, casualmente era el cumpleaños de una de las comensales y parecía haber empezado bien. Pedimos huevos rotos con sobrasada, berenjena y calama
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