Nou Roca

Un ejemplo de restaurante en Castellón , céntrico, familiar excelente, con personal muy servicial atento, dedicado y esforzado, que cuida todos los detalles de servicio. La cocina casera tradicional, con procesos caseros y elaboración gastronómica de buena comida muy sabrosa y deliciosa, cuidada y artesanal. Acompaña ,una correcta y orientada atención en mesa , con una conducción encargada muy responsable, atenta y esforzada. Francamente de calidad y relación precio inmejorable. Un modelo de negocio envidiable la verdad, esperemos que siempre perviva. No olvidamos el detallismo, estuvimos dentro muy a gusto, distintos y separados ambientes, por fuera en su terraza y justo de frente estaba la Iglesia. Lo tenemos agendado como """entrañable Castellón"", iremos allí muchos dias , y lástima que no estamos cerca en Castellón , se observa un diario excelente, excepcional en pareja , con nuestras familias, no existe un sitio igual. Muchas gracias!.

Relación calidad-precio muy buena. Pedimos un menú, y un plato y tapa. Las rabas de calamar espectaculares (aunque con lechuga "decorativa") en el menú todo muy bueno y fresco. Yo me pedí enterita a la plancha, hecha al punto pero sabía un poco a salsa Mery y, como me sienta mal el ajo, me sacaron otra enseguida. Las patatas fritas hechas al momento no congeladas. La paella de marisco, muy bien también. Los postres muy buenos, me pedí la tarta de queso con turrón, espectacular. El carajillo quemado descafeinado de 10. Buena materia prima y bien hecho todo. Lo único "malo" es que hacía calor, pero claro, estamos al lado de las máquinas de granizado que desprenden calor, estaba lleno y es agosto en Castelló.