Restaurante diferente a lo típico de la zona. Platos pensados y con un vuelta de tuerca, pero usando el mismo buen producto del lugar.
Un concepto que se aleja de lo tradicional y nos acerca a una cocina mas moderna y atrevida con cocina vista.
Carta contenida en cuanto a propuestas pero muy diferentes entre ellas.
El único punto negativo que le veo es la que la cantidad de algún ingrediente en plato puede opacar el gusto de los demás, como por ejemplo el plato de los mejillones donde el helado que me parece un acierto de sabor y no asi de cantidad hace que el plato pierda matices.
Recomiendo los bollitos de churrasco, aunque deben tener cuidado con los pequeños huesecilos que podemos encontrar.
El servicio por parte del camarero excelente. Atento y servicial a partes iguales.
Comida riquísima y atención excelente.
Me ha encantado especialmente el bacalao con sopa de cebolla. De entrantes el taco y el bollo de churrasco son dos cosas que repetiría seguro. Y déjate sorprender por los postres, son una delicatesen
Muy contentos con la elección. Todo muy limpio y un camarero de 12. Hay pocos camareros que te lleven la comida y sepan explicar que lleva. Un gran equipo desde luego. La comida de un gran restaurante.
![5]( "Recensione")
Fuimos dos veces aprovechando que nos quedamos una semana en Cariño, con eso os digo todo. El primer día que llegamos no sabíamos qué esperar, sólo sabíamos que la oferta de la carta nos llamaba mucho… nos llevamos una gran sorpresa con los platos. Todos estaban riquísimos, era una explosión de sabores y texturas. Algunas mezclas de sabores que a priori dudas de si combinarán, lo hacen a la perfección, al menos para nuestro gusto.
No es el típico restaurante tradicional, pero si te gusta la cocina atrevida y diferente, puede que te sorprenda gratamente.
Queremos destacar el trato de los camareros, que fue muy amable y tuvieron el detalle de explicarnos los platos.
Varían su carta cada 3 meses. Además, si sois vegetarianos y avisáis de ello, se toman el tiempo de diseñar platos elaborados aptos para vosotros que se salen de lo típico (tofu con verduras, por ejemplo jaja).
Nuestra pena es que vivimos en Madrid y nos pilla lejísimos, pero sin lugar a dudas es un sitio al que volveremos cuando vayamos a Galicia.
Alonso Fernández Pérez
+5
De los mejores sitios para comer por la zona si eres de los que les gusta la alta cocina y algo diferente! El trato y la atención por parte del camarero es inmejorable y la calidad de los alimentos y su elaboración es excepcional, siempre que vamos salimos encantados! Recomiendo probarlo
Buen sito para comer / cenar.
Comida excelente y riquísima.
Imprescindible reservar.
Buen calidad/precio
Un placer para los sentidos, se nota el "Cariño" que ponen en cada plato, con un trato excepcional. Sin duda repetiremos!!
La comida sobresaliente. Es una sorpresa de buen gusto. El servicio exquisito, tal vez demasiado distante pero sin queja. Y el local bien y si algo merece atención sería: mejorar las sillas y dotar a las mesas de manteles. Y más postres pq estaban fantásticos.
Personal super agradable y trato excelente. Comida muy buena y elaborada con gusto. Sitio bonito y actual con cocina abierta que te deja ver cómo se cocina. Buenos precios.
Él camarero es un profesional. A parte de ser muy amable, nos explicaba la composición de cada plato, cosa que se agradece. La comida estaba buenísima y a un precio bastante acorde con la calidad. Repetiremos seguro. Por cierto es un punto a favor esa amplitud y limpieza que da el tener la cocina a la vista.
Si te quieres salir de las preparaciones habituales del menú gallego, este es tu sitio. Pedimos varios entrantes y platos para compartir y todo estaba muy bueno. El servicio estaba al mismo nivel.
Merece la pena el trayecto para comer allí.
Francisco José Arroyo Calzada
+5
Trato muy formal pero a la vez muy bueno. Te explican con detalle cada plato, tanto los ingredientes como su preparación, que además puedes seguir en directo porque la sala sólo está separada de la cocina por una barra.
Los platos son excelentes y efectivamente se trata de cocina moderna pero las raciones son buenas.
Aspecto de los platos estupendo y mejor aún su sabor.
Precio correcto para la estupenda calidad ofrecida.
Para repetir.
Uno de los mejores restaurantes en los que he estado. Todos los platos que probamos estaban deliciosos y los postres espectaculares.
Es amplio y la decoración sencilla pero muy agradable.
El camarero que nos atendió, creo que se llamaba Cristian, un pedazo de profesional y super atento.
Nos hemos quedado con ganas de probar más platos y seguro que volveremos.
La relación calidad precio es excelente.
Lugar moderno con una carta contenida pero muy apetecible.
Ya habíamos ido hace 1 año y decidimos repetir el plato de verduras en tempura, que nos pareció exquisito y lo volvimos a confirmar.
Probamos además el salmón con berenjena y cacahuete, a nuestro juicio un plato muy especial y la costilla con arroz y castañas que nos encantó con la salsita que trae.
Para acabar, pedimos el tatín de manzana y un maracuyá, cacao y nuez . Los postres tienen el azúcar muy bien ajustado, dejando apreciar el sabor de todos los alimentos, lo cual se agradece mucho.
Volveremos!
Todo perfecto.
Sabores exquisitos. El servicio rápido y muy amable.
Lo que más me gustó fue cuando una señora que había comido al lado al pasar nos preguntó si estaba rico... Y al vernos tan satisfechas nos dijo orgullosa que el cocinero era su nieto.
Incluso nos informaron que cambian la carta a menudo y que si queríamos platos vegetarianos ect avisando al reservar los tendrían.
No se puede pedir más. Felicito a estos emprendedores incluso al elegir el nombre MAREA.
María Jesús Prieto Fernández
+5
No sabríamos decir que plato nos ha gustado más. Una cocina deliciosa, bien elaborada, platos estupendamente bien presentados.
Muy difícil mejorar la experiencia. Disfrutar de otra manera de entender la gastronomía gallega potenciando la maravillosa materia prima
![4]( "Recensione")
Si te acercas por Cariño, no dudes en visitarlos.
Encantador local de estilo industrial con toques de madera de pino, lo que le aporta la nota cálida y confortable. La cocina vista permite apreciar la coordinación del personal durante el servicio, trabajando en una cocina impecable y organizada.
El jefe de sala, súper amable, nos aconsejó a la hora de escoger la comida explicando, con todo detalle, cada plato.
Siguiendo su consejo, pedimos una tempura de verduras que, nos explicó, es el único plato que mantienen en carta desde hace 3 años, y realmente está buenísima. La compartimos entre 2, es una ración bastante generosa.
De segundo, y sin poder decantarnos por un solo plato, también compartimos arroz caldoso de merluza y costilla de cerdo con arroz basmati y castañas. No podría decir cual de los dos estaba más bueno, ya que ambos estaban excelentes.
Me ha sorprendido gratamente encontrar, en un pueblecito que casi se sale del mapa, un restaurante con una cocina como la que trabajan.
Sin duda volveremos a visitarlos.
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