Tan tan precioso tan lindo y entrañable, este pequeño paraíso ubicado en nuestro querido Bilbao, tan sorprendente en su repostería de carácter francés delicado y elaborado con mucho mimo.
Quedamos tan sorprendidos por su decoración y ambiente relajado que no nos pudimos resistir a probar su café cap
Sitio estupendo para merendar, puede ser en la terraza o en interior en mesas altas. Tiene café aceptable y los dulces muy ricos. Tomamos el muffin de oreo y está riquísimo, pero aconsejo compartir, es muy denso para 1. Buen sitio.
Histórico, artístico, entrañable y exquisito establecimiento en donde saborear la más fina repostería estilo francés en el centro de Bilbao. Con frescos del gran Aranoa, es de obligada visita si vienes por aquí. Además cuenta con una extensa carta de café, té e infusiones que elaboran con cariño y m
Desayuné aquí el martes por la mañana y no puedo estar más satisfecha: la calidad de los postres es muy alta (el croissant es prácticamente como el francés) y el capuchino también es muy bueno. El lugar está finamente amueblado y el gerente es muy amable. ¡Lo recomiendo para un excelente desayuno!
Hemos estado unos días en Bilbao y nuestro hotel quedaba cerca de esta cafetería. Un lugar muy acogedor con un café buenísimo y muchas opciones de desayuno. La atención es estupenda. Muy recomendable 😉
Me encanta. Sus cupcakes y sus tartas son espectaculares. La que más me gusta es la de especuláis y el cupcake red velvet. La única pega es que es un poco cara la repostería, pero entiendo que la repostería americana siempre es cara.
Siempre que vengo a Bilbo no puede faltar ir a esta cafetería. La considero un txoko perfecto, donde llevo a mis amigos de la ciudad como de fuera de ella. Además, es un lugar muy acogedor y perfecto para estar un rato tanto en compañía como con uno mismo. El trato de las trabajadoras es perfecto y
Solo se puede decir perfecto!!! Da igual lo que pidas, todo allí tiene un sabor especial, es imposible escoger solo un producto, para repetir una y otra vez!
El entorno, la música, las flores, el trato,...
Ni siquiera los pájaros pueden resistirse! 😉
Llegué a este sitio por casualidad, al entrar la decoración y la música transforman tu ajetreada vida en calma.... El trato amable del personal y la variedad de dulces me invitan a volver. Me gustó mucho el cheescake de manzana
El café más grande que me he tomado en mi vida además riquísimo.
Pese a ser un local pequeñito es muy acogedor. Nos hemos quedado con ganas de probar los cupcakes que tenían en el expositor. Sin duda volveremos algún día para poder hacerlo.
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