Can Ribas De Montbui

Precioso lugar no faltaron detalles por parte del personal todo exisito atención en cada momento

La verdad que el sitio es muy bonito. He ido en dos ocasiones a una boda y el trato de los camareros es genial, siempre tienen una sonrisa en la cara y sobretodo mucha paciencia. Las vistas para las fotos son increíbles y los espacios están muy bien cuidados tanto los exteriores como los interiores. No conozco precios pero los menús están muy buenos al igual que el pica pica. En general lo recomiendo.

Espectacular finca con todos los ingredientes para un día único. Magníficos jardines, bien cuidados, que te conducen a la masía original de la familia enmarcada por una buganvilia en fachada enorme de gran colorido donde recepcionan con una copa de cava. Bajando a la Sala del banquete se encuentra una terraza con inmejorables vistas se Sant Miquel del Fai y el Vallés con ámplia zona de sombra y un trío de música en vivo que ameniza el ir y venir de platillos. La sala de banquetes excepcionalmente decorada con exóticas plantas crasas y captus te introducen a un servicio de mesa de revista. La actitud y diligencia del jóven servicio es de 10. La comida correcta, un tanto eclipsada por los platillos del aperitivo. Gestionaron con solvencia el grupo de unas 110 personas.

Un lugar de 10! El otro día estuvimos celebrando en uno de sus salones la boda de una amiga, el momento fue mágico y no solo por toda la magia y el amor que desprendía la pareja, si no por lo bonito que era el lugar y lo bien que estaba preparado. Tuvieron cuidado con cada detalle y todo combinaba a la perfección entre sí y con el tono de la boda. Por otra parte los profesionales que trabajaron fueron increíbles tanto los propios como los externos como fueron la fotografía y el vídeo (C&C estudi fotografic y DiA audiovisuales), igual que el DJ, quien amenizó toda la velada y un gran baile. Los camareros fueron atentos y estuvieron todo el rato pendientes de si faltaba cualquier cosa, especial mención al camarero que nos atendió en nuestra mesa, Rubén, un chico agradable y educado que hizo de toda la cena un espacio relajado y agradable. Quién a parte de servir todos los platos sin perder la sonrisa, luego estuvo en barra con la misma energía radiante, sobre todo a la hora de aguantar algunos comentarios un poco despectivos que hubieron por parte de uno de los invitados manteniendo siempre una una actitud afable y profesional a pesar de todo. La única pega que puedo poner, y no es para nada negativa si no a gusto personal, fue que el menú especial para personas vegetarianas era bastante escaso, mientras al resto de comensales de la boda no pararon de servirles platos a la hora del aperitivo las personas con menús vegetarianos contábamos con muy pocas opciones y cantidades y no se pudo repetir, aunque una de las camareras nos ofreció como alternativa traernos unas patatas chips, buscando una posible solución, por lo que reafirmo la parte de que el personal fue muy atento. A la hora de la comida, a pesar de la buena actitud del camarero (Rubén), no se pudo salvar mucho el menú, las cantidades eran pequeñas teniendo en cuenta lo que habíamos comido en el aperitivo. No me meto en sabores ya que eso es bastante personal y cada persona tiene un gusto diferente, la comida estaba bien cocinada y hubieron platos que me gustaron más y otros menos, pero sí que podría haber un poco más de variedad y cantidad a la hora de realizar los menús vegetarianos o especiales en general, ya que había gente intolerante que también lo comentó. Dicho esto, nos fuimos contentísimos y aún recordamos entre risas el menú y con cariño a los camareros, en especial como he dicho antes al nuestro: Rubén que a pesar de ser bastante joven era muy profesional.

Sitio muy bonito para celebrar una boda. Con vistas del paisaje, en medio de la naturaleza, muy bien cuidado todo, cerca de Barcelona, muy buen trato del personal, comida muy buena, instalaciones reformadas, etc.