Botavara

Buen lugar para descansar y refrescarse en las mañanas calurosas. Tranquilo y acogedor. Buenos aperitivos. Trato amable. Por las noches un buen lugar para pasar una extraordinaria velada, con unas buenas copas. Excelentes platos, ensaladas, bocadillos, tapas, postres, etc., Su entorno es paradisíaco, con unas vistas impresionantes. Servicio rápido, personal muy atento. Lugar tranquilo y romántico.

Es un lugar al que visitar si o si. La comida, esta bien, un sitio playero con buenas vistas y comida normaliza, el precio un poco elevado, pero vale la pena simplemente por las vistas. Nosotros decidimos comer dentro, ya que er medio día y el calor era bastante fuerte, y decidimos ir, porque llamamos para preguntar si dentro tenían aire acondicionado. Al principio se estaba bien, (fuimos pronto, porque era una mesa de 6, no reservan y teníamos miedo de no tener sitio, ya que dentro no tienen muchas mesas) pero tal y como se llena a de gente, el calor era cada vez más insoportable. Hablamos con la camarera varias veces, y nos decía que estaba encendido, pero no sé apreciaba, y eso que el aparato lo teníamos justo encima y el lugar era pequeño. Volveremos seguro, pero no a medio día, y sin contar con el A/A.