Un lugar muy agradable, con mesas afyera también, camareras muy amables. No hay muchas cosas hechas en el escaparate, porque lo hacen todo fresco cuando lo pidas. Hay bocadillos de queso/fuet/jamón dulce/jamón serrano... La tarta de queso es exquisita, el café sabroso. Hay también menús al mediodía, muy económicos.
Llevo un plan de comida que es (o intento) realfooder, así que este sitio me pidió entrar en cuanto lo vi. Es un local lindo y acogedor y tienen un menú del día barato, que consistía en Primero, Segundo y Bebida, el primero podía elegirse entre tres platos y el segundo entre otros tres y sus quichés. Yo tuve suerte pidiendo crema de zanahoria, porque aunque estaba demasiado caliente, traía mucha cantidad, y la quiché de espinacas y queso de cabra era una buena ración y contundente, incluso me sobró un pedacito y el camarero muy amablemente me lo puso para llevar. Pero mis compañeros no tuvieron esa misma suerte, sus raciones eran un poco más escasas. Lo mejor de la visita fue el postre, lemon pie casera, celestial.
Fuí a desayunar con mi pareja y fué genial, brunch salado y dulce espectacular.
La atención excelente, las chicas majisimas, nos dieron recomendaciones de qué visitar.
Mi novia acaba de comentar que es una pena que no tengamos esta cafetería cerca de casa para que fuera nuestra habitual :-).
Laura Barandalla Villanueva
+4
Comida super rica y sana. La camarera es super simpática y atenta, lugar lindo. Lo único que en el menú deberían integrar pan y café o postre porque los platos no son muy grandes y si vas con mucha hambre igual se te queda corto.
Local muy agradable y acogedor. La comida riquísima, casera y ecológica. Venid! No os arrepentiréis
De la zona, lo más recomendable para almorzar. Muy cuidado, en todos los aspectos.
He probado la quiche de espinacas, y la recomiendo mucho.
Desayuno delicioso a buen precio.
Lugar de la visita: Greta Brunch Vermut
Fecha de la visita: 25.05.2019
Este establecimiento ocupa un pequeño, pero coqueto local, con unas pocas mesas en su interior y otras cuantas más en el exterior.
Ofrecen un menú muy competitivo en cuanto a precio (7 euros) aunque no incluye bebidas ni postre, y además tienen un par de ofertas para desayunar a buen precio.
En mi caso he estado desayunando un mini bocadillo de butifarra blanca que estaba delicioso, incluido el pan, y un café con leche muy bueno, todo por 2,70 euros.
Atienden de una manera muy atenta y servicial un chico y una chica jóvenes.
Menú rico dependiendo del día. Pero bien, he ido varias veces y siempre salgo contenta. Son paltos sencillos eso si. Pero son un poco demasiado lentos
Es como comer en casa, la comida es de 10, sanita y ligera y la atención super personalizada, ademas el menú es económico y perfecto en cantidad para una sola persona.
Comí muy bien de menú a excelente precio. Comida sana y casera. Seguro que volveré.
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