Como siempre, venir al Bar Deni es una experiencia de 10.
La calidad de los productos es insuperable, el tartar te deja sin palabras y no hablemos de los tacos!
Lo más sorprendente es que también sean buenos preparando pulpo, nunca podemos resistirnos a pedir el pulpo en su base de patata y huevo.
El servicio es amable y el lugar muy acogedor.
Gracias! Nos vemos pronto!
Delicioso; el lugar creativo e original, el ambiente tranquilo muy agradable, y para el final el postre 😋😋 realmente no se lo pierdan. Dejo unas fotografías de los que más me gusto.
Una comida excelente
Todo nos ha gustado
Platos sorprendentes...
Volveré a por el resto de platos
Si te gusta la carne es tu paraíso. Carnes muy bien cocinadas de una calidad excelente. Local pequeño( recomiendo reservar) con horarios muy marcados pero con un encanto especial. Trato personal encantador y muy profesional.
Súper recomendable!!. La atención, la comida todo del 100%, la selección del vino.
Estaba todo riquisimo.
Sobre todo destacar el fricando (muy recomendado) y la picaña tambien muy buena. Las carnes estaban bien de punto aunque quizas la cantidad de solomillo era un pelin pequeña. El unico plato que nos decepciono completamente fue el canelon.
El trato de personal de 10, muy muy bueno atendiendonos y recomendandonos cantidades y cosas a probar.
Sale a unos 50€ pax sin vino
Un lugar pequeño, tranquilo, para disfrutar de unos platos (principalmente de carne) maravillosos. El denito es de los mejores bocadillos que yo he probado, queda en la memoria y hay que pedirlo cada vez que se visita el Bardeni.
El servicio también muy agradable y cercano, con buenas recomendaciones.
Si eres un amante de la carne, no dudes en venir, vas a disfrutar cosa mala. Cada plato que pruebas es sorprendente y te invita a volver para probar cosas nuevas. la carta no es excesivamente extensa, pero dispone de platos fuera de carta que le añaden un plus y denotan esfuerzo por ofrecer algo más. Éramos dos e hicimos 5 platos y un postre con botella de vino, 60 euros por persona. No es un regalo, desde luego, pero se nota la calidad de la materia prima y el cocinado. El resultado es una carne que se deshace en la boca, mantequilla pura. A destacar el denito (obligatorio), un bocadillo que destaca por la ternura de la carne y su aliño, en el que todos los ingredientes suman; las costillas de angus impresionantes, una carne tierna que se desprende del hueso con sólo mirarla; el steak tartar, perfectamente aliñado; el taco, conjugando el carpaccio de solomillo con el ahumado de la berenjena y el ácido y fresco de la ensalada lo hacen muy suculento, y los huevos con parmentier y pulpo, un entrante bastante resultón. Servicio muy atento y agradable, siempre pendiente del comensal. En definitiva, un muy buen restaurante al que querrás acudir de nuevo ni que sea por una nueva dosis de denito, es droga dura.
Un local imprescindible en una de las zonas más emblemáticas de Barcelona. Local de capacidad reducida, pero lejos de ser un inconveniente, es un valor añadido! El trato es exquisito, la calidad de los platos INCOMPARABLE, el ambiente excelso y la atención absolutamente personalizada. Para nosotros no ha sido ir a un restaurante... Ha sido una experiencia gastronómica desde los entrantes a los postres, sin olvidar la especialidad del local... LAS CARNES!!!
Sin duda repetiremos y os lo recomendamos a todos aquellos usuarios exigentes con la calidad y educados en el trato a todo el servicio... Destilan amor y orgullo por el trabajo bien hecho. OS FELICITAMOS!!!
Restaurante espectacular! El concepto y el detalle de cada plato está cuidado al mínimo detalle. Por supuesto como indicia el mismo está especializado en carne con lo que cualquier persona que no se sienta cómodo con ello recomiendo no asistir. No obstante como experiencia culinaria es algo que se debe probar almenos una vez. Atención del personal excepcional.
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