La Vineteria Del Coll

WAOOO, nos encantó!!! El sitio está muy autentico, pero eso no es lo más relevante. Primero que todo, el señor que nos atendió muy pero muy amable y eso que andaba muy liado con tantas mesas, yo le reservé y le llegué casi 1 hora tarde y me atendió de lo mejor! La comida deliciosaaaaaa, nos ofreció el menú pero no teníamos mucha hambre así que decidimos picar y wao, que delicia, el pulpo divino, y el ibérico de muy buena calidad, es que hasta pan amb tomaca estaba increíble! No es barato, quizás sea mejor las opción del menú, pero picamos tan a gusto que fue un placer. Cerramos con una crema catalana que estaba de 10. Regresaría mil veces más ❤️

El mejor descubrimiento de Barcelona, bar con mucho encanto, para degustar un buen vino y una cocina casera y gourmet, con variedad de platos. Cada vez que voy pido las albóndigas, están de muerte! Sabrosísimas. La atención del camarero es excepcional, siempre con una sonrisa y ofreciendo muy buenas recomendaciones. Ambiente acogedor, íntimo y tranquilo, luz tenue. Me encanta, muchas gracias

Esta sitio ha sido un descubrimiento excepcional!! Carta bastante sencilla con platos buenísimos y frescos!! Precios super por la calidad de la comida y los camareros de verdad todos muy amables y sonriente no obstante el sitio lleno! Tienen una carta de vino muy larga, entonces mejor preguntar a los camareros para sugerencias. Super recomendado!!!

El sitio es muy acogedor y en el medio del gotico. Nos equivocaron de día de reserva pero han podido encontrar una mesa aunque fuera un viernes. Hemos pedido tapas para compartir (8/10 platos para 6 personas), 4 postres y botella de vino. De destacar las albóndigas, morcilla, escalibada, tabla de queso y tarta de queso y coulant. Todo muy rico y precio onesto (cada platos alrededor de 10 euros). Seguramente volvere de nuevo!

Vinos (excelentes) a precios bastante ajustados para ser restaurante. Por ejemplo un vinos que puede costar 12-13€ lo puedes encontrar allí por 15-19€ Siempre me gustó este sitio. Pero mi última vez fue muy buena experiencia. Nos encantó y sorprendió que tienen harina sin gluten y pueden hacerlo casi todo sin gluten. Incluso las croquetas! Además todo estaba muy bueno. Y eso y el buen servicio propició mi review. El sitio es espacioso y uno se puede sentar tranquilo (algo no tan común en el gótico) Una vieja taberna pero reformada, con aire acondicionado, limpio y baños cuidados.

Restaurante íntimo, con mucho encanto con tapas locales y vinos locales. Es un acierto ir a esta calle silenciosa y peculiar del Gótico y el servicio, a pesar de estar siempre con el restaurante lleno, es siempre amable. Si te gusta el buen vino y quieres acompañarlo de una cocina casera y de calidad a un buen precio, este es el lugar. Embutidos variados, quesos a elegir, tapas como escalivada, tortilla y croquetas hechas ahi, y postres con y sin gluten 🧡

Tenía mis reservas con este lugar por su ubicación. Pensaba que sería otro lugar para turistas. Por suerte, me equivoqué. Es un lugar de tapas o más bien raciones. De lo que probamos, todo muy bueno. Atentos al trinxat i a las albóndigas Y ¡OJO! Dejad sitio para el postre porque estás muy buenos. Recomendable el pie de castañas. Buénísimo. El camarero que normalmente nos atiende es muy amable.