La Caseta Del Migdia

Bonito lugar para tomarte algo con bonitas vistas al mar (lado puerto) desde lo alto de Montjuïc. Tienes que ir tu a pedir a cocina (no hay camarero que sirvan o tomen nota) y la comida hay tapitas como olivas, patatas chips... y sino el plato que hacen para comer que consiste en costilla de cerdo, patatas a la brasa y pan con tomate.

Si te apetece un domingo al mediodia diferente con música en directo, pruébalo. Puedes comer y beber alli estando en un sitio privilegiado en Montjuic. Solo tienen un plato combinado que está muy bueno y opción de cambiar la carne por escalibada. Buen ambiente, con parking cercano y rodeado de naturaleza. No es un lugar pretencioso, es sencillo pero muchas veces en la sencillez está lo especial. Fuimos a celebrar un cumpleaños con amigos y tras leer las malas criticas ibamos un poco asustados, pero sabiendo lo que ofrece La Caseta, es un plan diferente para alejarte de la ciudad sin irte de Barcelona.

El entorno es agradable para visitar con perros y disfrutar de un paseo. La comida resulta cara, teniendo en cuenta que es un plato combinado sin posibilidad de elegir (butifarra, ensalada y pincho moruno de pollo). La bebida no está incluida. Disfrutamos de un concierto de música cubana que nos gustó bastante.

Mesas repartidas bajo un pinar y con unas vistas espectaculares del puerto de Barcelona. Es una terraza muy sencilla y relajada. Ponen siempre muy buena música ambiental y a veces hay actuaciones en directo. Tienes que ir a pedir a la barra las bebidas y también ofrecen unos platos que hacen a la barbacoa. Todo es simple pero efectivo, así que si buscas algo sofisticado este no es el lugar indicado. Pero es que da absolutamente igual porque la gracia de este merendero es justamente su ubicación y falta de pretensiones. Si te gusta alejarte del estrés de la ciudad, relajarte en la naturaleza mientras escuchas música tranquilamente y con vistas maravillosas, entonces sí este es tu sitio! Se puede llegar de muchas maneras, pero mi preferida es subir a pie ir por el camino de ronda que rodea el castillo, las vistas de Barcelona, el mar y el puerto son increíbles. Y luego ya seguir el camino contrario y llegar de nuevo a la ciudad siguiendo la pista que atraviesa el pinar y baja por la montaña. Atentos a los horarios porque a partir de Sant Joan ya abren muchos días y también por la noche. Muyyyy 🔝

El sitio súper bonito, hay un bus (el número 150) que te lleva hasta arriba y luego solo hay que andar unos 5 minutos. Las vistas bonitas, y se puede dar un paseo por el parque. Nosotros reservamos mesa y era obligatorio el menú de 20€ que incluía aperitivo (cacahuetes, bolsa de patatas, y olivas), 2 bebidas, un plato con ensalada, un pincho de pollo, y una butifarra, y helado. Los camareros súper majos y amables.