Mussol Arenas

Estuvimos cenando en pareja y pedimos el menú de 28 euros, la verdad vale la pena (1 copas de vino, 1 botella de agua, pan con tomate, 1 entrante, 1 principal, postre, café). Todo super bien, cena y servicio. Comida abundante y de calidad y camareros muy muy muy amables y simpáticos (lo mejor de todo) Repetiremos sin duda alguna.

Buen restaurante para comer comida catalana a lo alto del centro comercial de Les Arenes. En nuestro caso comimos al mediodía con unos familiares y estuvimos muy agusto. El personal genial. Precio correcto. Comida buena. Carta bastante limitada pero suficiente para satisfacer cualquier estómago. Pedimos pollo, pan con tomate y postres (coulant y crema catalana). Excelentes vistas de Placa Espanya, Montjuïc y Barcelona en general. Disponen de dos ambientes: terraza e interior. Mesas y asientos cómodos y espaciosos

Vengo a recomendar este sitio tanto por la comida (precio y calidad) como el servicio. Ha sido un gran descubrimiento y es de estos sitios que sin duda te apatece repetir. El camarero Leo fué muy simpático, atento y amable. Una experiencia única 🙌🏼 Súper recomendadas las croquetas de jamón ibérico y la carne de vaca

Repito a menudo, tiene muchas opciones veganas y vegetarianas, la calidad de la comida es buena y también tienen vinos de calidad. La atención del personal, siempre correcta, muy amables. Como dato a mejorar, sorprende que siendo un restaurante con opciones veganas, únicamente tengan leche de vaca y no haya ninguna opción vegetal.

Cenamos dentro ya que se estaba fresquito porque fuera hacía mucho calor. Lugar acogedor, mesas algo juntas y personal agradable, aunque tardaban un poco en atender, sobretodo al principio. Comimos un arroz espectacular y unos escalopines de ternera buenísimos. Sin duda repetiremos y precio asequible.

Hacía tiempo que no iba, tenía buen recuerdo pero anoche fui a cenar con mi padre y ha sido una excelente experiencia. Las berenjenas con miel de caña y los champiñones rellenos, exquisitos! De segundos pedimos el arroz con verduras y romesco que estaba al punto y riquísimo y la coca de espinacas, tomates secos y queso de cabra: muy buena! Los postres (tarta de manzana y profiteroles) muy ricos pero se podrían mejorar, sobre todo la tarta de manzana. La mesa y sillas en terraza muy cómodas y el ambiente, si bien es muy turístico, es agradable y tranquilo. Lo que debo destacar es la excelente atención que recibimos por parte del jefe de sala Javier y del camarero Alex. Muy atentos y simpáticos. Volveremos sin duda.