Reseñas de Pebre Negre Restaurant

El local es muy acogedor y tranquilo. La atención muy buena y eso que había solo una camarera para todo el local y terraza. La comida muy buena. Recomendable la bomba de morcilla, los mejillones y la torrija borracha estaba espectacular. La única pega que le puedo poner es la presa ibérica. Para el precio que tenía era una pieza muy pequeña y algo seca.

Genial sitio para comer el menú al mediodía de un día laborable. Comida bien elaborada, buen producto, límpio y servicio muy amable. No se han tomado mucho riesgo a la hora de forzar los sabores. Sin excesivas salsas y sal a punto en todos los platos. Un aspecto a valorar ya que te arriesgas a dejar indiferentes a los comensales, pero el resultado es todo lo contrario, una comida agradable a un precio muy competitivo. Relación calidad precio muy buena. Volveré para cenar un día.

Lugar con terraza muy apetecible. El servicio por parte del camarero que nos atendio fue exquisito. Nos atendio divinamente. La comida muy buena. Pedimos tapeo para compartir y el jamon estaba riquísimo. El carpaccio de buey muy presentable y las croquetas realmente caseras. Lo acompañamos con un Ribera, Entrelobos, que rego la cena divinamente. Muy recomendable sobre todo por el servicio.

Un sitio acogedor y una atención única, el trato ha sido muy familiar, la comida exquisita 😋 ( la tortilla de patata hecha al momento es un 10 sobre 10. Y el coulant de chocolate más de lo más. A mi pareja le encantó el solomillo, el tartar y muchos platos más. La camera ( vero muy atenta) y para cerrar con broche de de oro pedimos mojitos de frutos del bosque increíble.🍹🍹🍹 Lo recomiendo 👍

A un paso del Corte Inglés de María Cristina, el Pebre Negre es un restaurante precioso, presidido por una imponente barra, llena de cubos de espejo, madera clara y luz cálida. El interior es sencillo, pero no simple, un espacio único donde conviven unas 10-12 mesas, algunas asomadas a los ventanales que dan a la calle y de los que cuelgan guirnaldas de luz que aportan calidez al local. También dispone de terraza, con estufas para el invierno. En terraza son petfriendly y disponen de bebedero si tenéis un peludito. Bravo por vosotros, el camarero que nos sirvió fue muy muy amable y simpático, a la par que profesional. En cuanto a la oferta culinaria, es moderna, mediterránea. Los platos, muy bien presentados. Elegimos un hummus y unas gambas rebozadas con mayonesa de wasabi. Y de segundos, el canelón de rabo de toro y el steak tartar. De postre, un tiramisú. La verdad, con ganas de repetir y probar más de la carta!

Bonito lugar, hubicado en buena zona de Barcelona para cenar y tomar unas copas. La carta que tiene es variada y buena, he probado canelón de rabo de toro, la bomba de morcilla, y otros platos todos muy buenos..., sus croquetas de jamón o bacalao que delicia se deshacen en el paladar. Os recomiendo el sitio para degustar la calidad de sus platos. Por otro lado, el servicio no se queda atrás, l@s camarer@s muy atentos y el ambiente del lugar muy cálido. Sin duda repetiré.