Can Paixano (la Xampanyeria)

Nos recomendaron este lugar unos amigos. Llegamos y había fila para entrar, honestamente nuestras expectativas eran altas. Debo decir que la champaña es muy muy buena y a excelente precio, sin embargo, el lugar no cuenta con sillas y nos tocó parados en una esquina terrible que estaba al entrar a la derecha. La comida es muy básica. Volvería sólo por la champaña peeero, nunca a esa esquina que nos asignaron, que además olía a cigarro y había mucha basura.

Ein MUSS für jeden der nach Barcelona kommt! Gibt es soviel ich weiß seit den 60 ern und immer nich da. Sehr authentisch mit einfachem heimischem Essen und leckerem Cava (ist das einzigste was serviert wird) (Traducido por Google) ¡Imprescindible para cualquiera que venga a Barcelona! Hasta donde yo sé, existe desde los años 60 y todavía no existe. Muy auténtico con comida local sencilla y delicioso cava (es lo único que se sirve)

La bebida , la comida súper bueno, la atención si vas a una hora que no esté muy lleno está bien, si no te toca esperar, el ambiente tiene horas puntuales donde está súper lleno y si no te gusta la multitud es incómodo , yo fui a las 14 horas y estaba lleno a las 15h ya estaba menos concurrido, igual lo recomiendo porque está súper bueno , las mini tapitas que hay y los bocatas están buenísimos y el Can paixano rosado para mí gusto es el mejor!

Tengo debilidad por este local donde su decoración y sus productos te hacen sentir el peso de su historia. Muy recomendable su cava rosa que debes acompañar de un bocadillo de butifarra o de sobrasada. Suele estar lleno, especialmente los fines de semana. Como decía es uno de mis sitio preferidos de Barcelona.

El segundo de nuestra ruta esa noche, el bar no es tan pequeño pero es uno de los concurrido, tuvimos que hacer una larga fila para encontrar un pequeño espacio en la barra. La persona que nos tocó realmente no era amable, quizás había tenido un mal día . Su cava rosada es buenísima. Definitivamente quisiera volver a probar otras cosas en otro horario y con otro servicio.

Me encanta este local, es como una taberna. Es un sitio centrado en cava, tapas y bocadillos, la comida en general está buenísima y el servicio es rapidísimo. Llegamos y tuvimos que hacer bastante cola, pero en cuestión de 45 minutos entramos. También me parece bastante barato para los locales que se pueden encontrar en Barcelona. La única “pega” sería que es un lugar donde se come de pie. Para nosotros no fue un problema, merece totalmente la pena y al final también forma parte de su encanto. Volveré.

Llevamos años viniendo a este lugar y la verdad es que nunca decepciona. Es importante saber que se encontrarán con un lugar informal donde se come parado. Sin embargo, la atención y la calidad de la comida hacen que esta sea una experiencia necesaria si visitas Barcelona. Los fines de semana se hace fila para ingresar ya que el local es pequeño, por lo que recomiendo ir apenas abran. Recomiendo enormemente la cava rosat, el sándwich de jamón con pimientos, cebolla y queso, el chorizo, las croquetas y el aperitivo surtido. Se come muy bien, en un ambiente animado y por un precio muy conveniente.