Asador Papabuey

Sitio fantástico para comer, carne espectacular, verduras impresionantes, y precio fantástico. Recomendable 200%. Sitio limpio y brillante, ambiente tranquilo y acogedor. Maria José la jefa de sala muy atenta a todo. 3 personas a comer 70 euros con vino, agua, postre, café y chupito. Volveremos, sin lugar a duda!!!!!!

Un sitio estupendo. Fuimos 4 comensales y pedimos: -revuelto de boletus - el sabor era intenso y las setas estaban jugosas. -croquetas papabuey- eran de carne . Unos croquetones que estaban muy ricos ,la bechamel suave y fina, muy buenas . - parrillada de carne con verduras y patatas arrugadas con mojo picón - te la servían sobre una bandeja de piedra caliente y l carne estaba exquisita. Para algunos nos trajeron una piedra aparte para cocinarla algo más en caso de quererla más hecha. El mojo era receta canaria ,muy rico también. La parrillada de verduras tenía un surtido de berenjenas, calabacines, pimientos, cebolla, setas y manzana muy ricas , al punto de sal. - postre de leche frita y tarta de queso con arándanos - la leche frita muy buen hecha, cuajada y con un sabor de canela , limon y azúcar rico. La tarta de queso sabía a queso no como a otras que saben a cuajada sobretodo. La verdad que todo estaba espectacular. La atención buenísima también . Nos atendió un chica aconsejandonos en todo momento , nos vino a saludar el cocinero y a preguntar muestra opinión . El local estaba limpio y bien decorado. Bien ventilado y cumpliendo con las precauciones covid.

Sin duda, es uno de los mejores restaurantes que hay en Badajoz. El servicio es eficiente, el trato es muy amable y la comida es suculenta. Recomiendo las croquetas de cecina y el solomillo de buey a su punto. El vino de la casa también es de buena calidad. El ambiente es genial también, tranquilito y se puede conversar sin gritar. Recomendable 100%

60 cumpleaños de marido visitando Badajoz con los primos y se nos hizo tarde para comer. Todos los bares llenos por la hora y por casualidad entramos aquí. Anularon una mesa y pudimos comer. Suerte tremenda a última hora porque es espectacular la comida, el trato inmejorable, los postres de muerte y una amabilidad que ya me gustaría que tuvieran en muchos sitios. No sé cuándo volveremos, pero lo que es seguro es que comeremos aquí. Mejor reservar porque está muy solicitado y merece mucho la pena. Muchas gracias por todo.