Jocus Cerveceria

Ayer unos cuantos amantes del arroz con pata nos dejamos caer por Jocus en San Vicente para comprobar in situ si la fama de su arroz era verídica, y si, nos encantó, de los mejores que se pueden comer en Alicante. Precio calidad correcto, trato amable de los empleados y mención especial al cremaet que nos preparo Irene, rico, rico. Volveremos a probar otro arroz con manitas y un meloso de pulpo que pasa por allí y tenía una pinta genial👏👍

Un bar de pueblo con platos espectaculares, personal atento, y comida deliciosa. Destacar el arroz con patas, un arroz gelatinoso que se pega al palador que te pega los labios y que derrite tus gustos. El bar es un bar de pueblo de los de antes donde va la gente de San Vicente a degustar manjares como este arroz.

Era mi segunda vez que probaba el ARROZ Y PATA y esta vez llevaba a un comensal súper especial a mi padre, aquí os dejo el resultado de lo que pedimos, éramos cuatro y quedamos encantados con la comida, es increíble el género con el que trabajan, dando así resuelta dos como este, el trato es inigualable siempre estando pendientes de si nos faltaba algo, volveremos porque el ARROZ Y PATA ( ya probado con anterioridad por lo), nos ha fascinado y se ha convertido en uno de nuestros favoritos !!!!

Este medio día hemos celebrado el 80° cumpleaños de la abuela en Jocus. Eramos una mesa grande, unas 16 personas, y todas hemos salido muy contentas con la calidad de la comida y el buen servicio ofrecido por parte de sus camareras y camareros. El menú consistía en un gran número de entrantes, todos ellos muy ricos y en buena cantidad. El plato principal han sido dos arroces, uno del Senyoret y otro de Pata, especialidades de la casa y ambos ESPECTACULARES. Para cerrar, un variado de postres al medio, que estaban deliciosos, y café o té a elegir. La calidad de los ingredientes de cada plato era alta y el servicio, rápido y atento con todos los comensales, especialmente con mi abuela. La calidad-precio ha sido muy buena, competitiva y acorde al mercado: un menú con barra libre durante la comida, varios entrantes y un plato principal muy generoso, más postre y té o café por 35€. No se puede pedir más. Una agradable sorpresa encontrar un sitio de estas características en San Vicente. A buen seguro volveremos, a más tardar dentro de un año, porque la abuela ya ha reservado mesa para su 81° aniversario (:

Lugar muy acogedor. Comes a gusto y tranquilo. TODA la comida es espectacular, natural y tratada con respeto. Buenísimo de verdad. Precio bajo para la calidad que se sirve, que es maravillosa. No me puedo quedar con un plato porque todo estaba increíble. La atención muy cercana y muy buena también. PD: me faltan las fotos de las bravas, del jamón y de más cosas. No dió tiempo a hacerlas porque el sitio es para disfrutar. Solo con la presentación te entra por los ojos, luego te conquista por el paladar.