Gran variedad de platos. La comida está muy rica pero las raciones son demasiado grandes. Las croquetas de jamón buenísimas aunque estaban un poco negras por fuera. El secreto me gustó mucho pero había 2 filetes grandes, uno encima del otro en plan montaña de secreto sin casi hueco para las patatas y no pude terminarlo. Los camareros muy atentos y amables.
Kevin castañeda albacete
+5
El mejor restaurante de Alcalá de Henares, por calidad y cantidad.
Fuimos de menú del día pero no es la primera vez que voy y siempre quedo muy contento.
Todo está buenísimo, pero de los primeros lo que más nos gustó fue la ensalada y los fusili.
De los segundos más de lo mismo pero lo mejor fueron el secreto y el solomillo.
Los postres todos caseros y espectaculares el mus de yogur con sirope de arándanos, la tarta de queso y la tarta de manzana buenísimos.
El ambiente y la atención del equipo es de 10.
La prueba de que se puede ofrecer cocina de calidad a precio más que ajustado. En Alcalá estamos acostumbrados a que la consumición la acompañen con una tapa, más o menos acertada, según en qué sitio puedes elegir... Decir que la tapa de Ébano nos ha sorprendido es quedarse corto (hasta dos veces hemos dicho que se habían confundido, que no habíamos pedido nada). Y es que por presentación, cantidad y calidad, las tapas que ofrecen en Ébano se salen de la norma.
Tenía muchas ganas de probar este sitio. Conseguimos una mesa para cenar un martes y la experiencia nos encantó.
Todas las raciones son abundantes (las medias te dan para probar más que de sobra el plato si vais 2). Destaco lo bien presentado que estaba todo y el toque distinto que tenían todos los platos que probamos.
En nuestro caso pedimos buñuelos de bacalao, varias croquetas para probar cada tipo (sin duda el top fue la de callos con un huevo de codorniz por encima),el pollo (con un toque de ralladura de naranja a la hora de servir) y el codillo (este último nos costó ya terminarlo porque trae muchísima cantidad).
Los camareros fueron muy amables y nos gustó la rapidez a la hora de servir (no hubo esperas largas entre cada plato).
Lo recomiendo completamente y volveré a seguir probando cositas de la carta!
Una experiencia increíble.
Hicimos una reserva para tres personas y quedamos encantados con el lugar.
La comida estaba increíble, la cantidad era buena y el sabor exquisito; el emplatado muy limpio y bonito.
En cuanto al personal del local muy amables y muy bien servicio.
Totalmente recomendado.
Nos encantó la comida, muy bien presentada, muy rica y abundante. Los camareros muy amables y atentos. El local estaba lleno. Hay que reservar porque sino es casi imposible encontrar sitio.
El salón era bastante ruidoso debido a la cantidad de clientes que había.
Comimos unos huevos rotos con mucho jamón, tal como indica la carta. Lo compartimos entre los 4 que fuimos por indicación del camarero ya que con los segundos que pedimos era suficiente. Y realmente así fue.
Los segundos fueron tataki de atún rojo, bacalao skrei a la brasa, Tataki de pluma ibérica y tajín de codillo al estilo mongol. No puedo decir que estaba más rico, todos espectaculares.
De postre compartimos una tarta de queso espectacular y un sorbete de mango.
En la carta hay un montón de cosas que tienen que estar deliciosas. Hay que volver.
121€ con botella de vino, cerveza y agua.
Fuimos a cenar sin reserva y a pesar de tener mucha gente lograron hacernos hueco. Fueron muy amables y los platos que pedimos estaban todos buenísimos y muy bien de cantidad. Además de precio estaba increíble
Lugar espectacular. Segunda vez que asisto y no defrauda, más bien diría que mejora. Cocina abierta y atención rápida. Hay menú de fin de semana por sin incluir bebida, pero decidimos probar la carta. Precio asequible en relación la cantidad con la calidad. Destaco las croquetas (buenísimas cualquiera que pruebes) y los buñuelos de bacalao, muy abundante si sois varios comensales. Los torreznos muy peculiares con el guacamole de base. Y variedad de postres, destacando la torrija, casera y la sieven caliente con helado.
He ido varias veces a comer en familia, una vez yo sola y con mi pareja, el menú del día; sin duda puedo decir que la calidad/precio/cantidad es excepcional y utilizan buena materia prima y se nota. Sus postres también son caseros.
Una vez pusieron una hamburguesa de cordero, pan brioche y provolone en el menú del día que fue de las mejores que he comido.
El servicio es amable y ambiente agradable.
Íbamos con un Smart box y no pudimos elegir mejor sitio para canjearlo. El restaurante tiene una decoración muy agradable, el trato de los camareros es excelente. La comida bestial. Pensábamos que iba a ser el típico sitio 'pitiminí' que todo tiene muy buena pinta y está muy rico pero te quedas con hambre, y para nada. Además de que los platos están muy bien elaborados y presentados, las raciones son generosas. Pedimos buñuelos de bacalao, ensalada de queso de cabra, tartar de salmón y secreto ibérico. Acabamos llenísimos. Mencio especial a la tarta de queso del postre, suave y cremosa como pocas he comido. Si vas a Alcalá, sin duda un sitio a tener en cuenta. Nosotros repetiremos.
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