O'sampaio - Santa Cruz

Es un grupo hostelero con varios locales, fusionan comida tradicional gallega, este local en particular dispone de una vista espectacular. Las porciones son bastante generosas, así que cuidado con pedir de más 😛… mi recomendación: la tortilla tradicional, el pulpo gallega, raxo de pollo de los mejores 👍🏻, los calamares fue una lastima porque se sentía el sabor a aceite/refrito 👎🏻

Local muy bien ubicado, con una terraza enorme y unas vistas privilegiadas. Al parecer de lunes a viernes tienen menú del día (2 platos + postre, bebida y café), bastante económico sobre todo por cantidad (10€ interior, 10'50€ en terraza). Comimos de primero un risotto de setas que estaba realmente rico, y de segundos, un roti de pollo y bacalao confitado. La verdad es que muy sabrosos ambos también. La atención fue rápida hasta que empezó a llenarse de gente la terraza, dejándonos esperando bastante tiempo por el postre (+ de 15 min. para que nos lo apuntaran). Tuvo que salir el jefe de camareros a agilizar el servicio en terraza y atender todas las mesas. Nosotros acudimos un martes a las 13:30. A partir de las 14:00 es cuando se les fue complicando la cosa, de ahí que entendamos reseñas anteriores en las que se quejaban de "colapso" en fin de semana. Ese pequeño detalle hace que lo dejemos en 4 estrellas y no 5, porque del resto nuestra experiencia culinaria allí fue excelente. Los camareros no obstante, fueron muy amables. Muy recomendable. Mejor llamar para reservar mesa con buenas vistas en la terraza.

Ayer fui por segunda vez y me atendieron genial, pedimos tres consumaciones y nos pusieron patatas fritas y aceitunas, al ratito nos ofrecieron una tapa de ensalada de pasta a cada uno, ademas nos pasaron dos vez una fuente de croquetas y empanadillas; las vistas espectaculares. En cambio la primera vez que fui, con cinco consumiciones, no me ofrecieron nada, unas pocas patatas fritas para todos, ademas las tuvimos que pedir , creo que la diferencia es porque estaba dentro. Esta claro que en la terraza es otra historia. Menos mal que no me he quedo con la primera experiencia.