Peculiar

Una pena verlo tan vacío (éramos los únicos comensales). La comida resultó muy rica. Croquetas obligatorias, muy buenas. El bonito estupendo, los huevos con gamba de huelva super golosos y la berenjena tremenda. Decepcionante el brioche de costilla, bastante seco y la salsa que lo cubre parece muy artificial. El postre muy rico. Servicio amable.

Primero de una saga, que ha dado lugar al grupo 'Peculiar', que aurge tras un tiempo de aprendizaje de su creador en el famoso y único, el original 'El de Alberto'. Probamos el menú degustación, formado por platos de la carta (48€/comensal). Sí bien estaba todo muy bueno, con explosiones de sabor por la variedad de sabores concentrados, creo, en mi opinión, que se ha visto superado por otros restaurantes de la misma cadena. Destaco la amabilidad y profesionalidad de todo el personal. Volveremos para seguir probando diferentes platos de la carta.

En este caso, un viernes y sin reserva, ha sido una grata sorpresa. Platos muy elaborados y muy bien presentados. El ambiente espectacular. Por criticar algo, los chocos ya de por sí estaban buenísimos, igual una salsa más sencilla me hubiese gustado más. A MÍ, simplemente por gusto personal. Destacar y agradecer el trato de las camareras. Simplemente perfecto. Mil gracias

Tenia muchas ganas de ir y no defraudo para nada, platos super elaborados y super ricos. El local es pequeño pero muy agradable y acogedor, el trato estupendo. Se cena en dos turnos, el primero a las 21h y el segundo a las 23h. Recomienda pedir mas lo de fuera de la carta por producto de temporada. Salimos encantados para repetir a probar nuevos platos y nuevas experiencias.

Resumen: Local perfecto para cenar con platos de alta calidad y sabrosos. Comida🍲: La carta va cambiando durante el año. Nosotros pedimos croquetas de jamón de bellota(muy recomendables), un pan brioche con carne mechada y alguna salsa, unos baozis, chocos, pluma(riquísima) y por último jarrete con gnocchi. Local🏫: Sitio céntrico, bien situado, cuidado y acogedor. No ha sido nuestro caso, pero si destaco que hay mesas que por espacio del local están demasiado pegadas. Entre ellas utilizan una especie de pequeña barrera de cristal para privatizar algo más cada mesa (se agradece). Servicio🤵: Muy amables las camareras que nos atendieron, todo llegó bien de tiempo y nos recomendaron muy bien en las cantidades, algo a destacar. Puntos a mejorar🕵️‍♂️: En general todo muy bien, lo único que nos llamó la atención fue que nos quedamos con ganas de probar los "filipinos rellenos" un clásico al que invita la casa para finalizar la comida que, a pesar de venir en el ticket como que si nos los habían traído, no fue así. De todas formas, entendemos que seria por las prisas de estar cerca del cambio de turno.

Este tipo de restaurantes no me suelen entusiasmar, pero la verdad es que me ha gustado bastante 👏👏 No es un restaurante barato, eso lo sabe todo el mundo, pero no son platos que te puedas hacer tú fácilmente en casa y, además, sí que están genuinamente ricos. Por ello, pienso que para quien se lo pueda permitir sí que merece la pena, aunque sea probarlo. Los platos no son muy grandes, como suele ser lo habitual en sitios "finos", pero diría incluso que pensaba que serían más pequeños, así que bien. Invitan a aperitivo y a minidonetes al acabar. La atención fue muy buena. Muy correcta, atenta y cordial.